Bailu empezó a ojear el cuaderno, unas páginas después lo soltaba y sacaba a Gyria de aquel lugar, la supuesta cámara de torturas era una especie de sala de baño caliente de un burdel. A la mayoría de las aves no les gusta el agua, en especial las que no saben nadar y al parecer al brujo del terror le asustaba en la misma medida que lo excitaba la idea de morir cocinado en una gran olla de leche. Claro no era mortal realmente, pero en sobrenaturales mitad ave o pez, debía de ser realmente terrorífico ser lanzado a una piscina de leche caliente y ser cocinado lentamente. Aunque según sus notas tuvo más amantes en aquel lugar que enemigos y obtuvo suficientes datos sobre los niveles de estrés y placer que provocaba su piscina de leche del terror. Siguieron avanzando, habían corredore

