Capítulo 1

1088 Words
Efectivamente el destino está en mi contra. Cuando cumplí la madurez y mi lobo despertó me di cuenta que era un lobo hembra. Su nombre: Leyna. Ella me convierte en el lobo hembra del que las leyendas hablan. Al principio me fue difícil entender lo que era y lo rechazaba, aún estoy en el proceso de entender a Leyna. —Tu Mate se encuentra cerca— dijo ella mientras disfrutaba de mi almuerzo. —¿Si? No me importa en absoluto— dije indiferente. A parte de ser el lobo hembra debía soportar la idea de que mi Mate fuera un humano. Eso ni de broma. Los humanos son inferiores, eso debe saberlo cualquiera. —Hola, Breatrisa— dijo el humano, sentándose en la silla al lado mío. Miró a mi hermana y dio una sonrisa, sabía que a él le gustaba ella y eso ponía mal a Leyna. —Hola, amigo— mi hermana saludo alegre. —Hola, Franz— me saludo a mi también, pero yo solo me dedique a terminar mi almuerzo y cuando termine, me puse de pie y salí de ahí. Estaba por perder el control sobre Leyna y estaba seguro que ella iba a lanzarse sobre él. En verdad que ese niño era mi mayor enemigo en todos los sentidos, pero tenía que soportarlo porque sus madres y mis padres eran amigos cercanos. El humano fue adoptado y cuando llegue su momento, su madre vampiro lo convertirá y él tomará posesión del clan al que pertenece. No para de hablar sobre ello, así que estoy harto de las charlas que tiene con mi hermana. Al término de las clases volví directo a casa. Tenía un estricto horario, así que cuando mis clases terminaban tenía que ir a casa para entrenar con mi padre. El tiempo era oro, así que debía usar cada segundo para fortalecer mi cuerpo. Después de que el entrenamiento terminó fuimos a comer a casa y pude darme cuenta que el humano se encontraba ahí. Harto de él solo comí y fui a mi habitación y me encerré ahí por el resto de la tarde. —Hermano— Breatrisa tocó la puerta y entró en seguida —Iremos a divertirnos ¿vienes?— pregunto y me dio una sonrisa. —Paso por esta vez— seguí mirando mi celular. —Eres un aburrido— dijo el humano detrás de mi hermana. Yo despegue la vista del teléfono y lo miré a él —¿Si? No me importa realmente tu opinión. —Hermano, por favor— pidió ella. —Deja que se ahogue en su sufrimiento, es patético verlo así— él sonrió burlón y le pegó muy en el fondo a mi orgullo, así que me puse de pie y caminé hacia él. —Iré— lo miré con superioridad. —Que bien— mi hermana sonrió —Vamos entonces— me tomó del brazo y me hizo caminar hasta el primer piso, en donde mis padres se encontraban. Ellos nos miraron y en especial a mi —¿Irán a algún lugar?— pregunto mi padre. —Si— respondió mi hermana —Iremos a divertirnos— sonrió. —¿Franz también irá?— preguntó mi madre. —Si, decidí que quería divertirme— sonreí falsamente. Sinceramente iba más a fuerza que por gusto, pero era obvio que no iba a dejar que ese humano me llamara patético. —Bien, entonces diviértanse— dijo él y se puso de pie, caminó hasta donde nos encontrábamos para darnos un beso en la frente —Beban con moderación y no cometan nada malo— miró a mi hermana en primer lugar. Bueno, ya que yo jamás había ido a lugares así era cero probable que yo cometiera algo de lo antes mencionado. En cambio, mi hermana era el problema principal en esta situación, ella ama por sobre todo ir a fiestas y divertirse, por eso hay ocasiones que no llega a casa porque duerme en casa del humano, ya que la mayoría de fiestas son hechas en su casa, sus madres y él viven en casas diferentes, bendito poder económico. En fin, ella había prometido no meterse en problemas, pero el alcohol es algo que ella ama y cada que bebe hay algo que sale mal siempre. La última vez se transformó y atacó a un par de vampiros. El autocontrol es algo que escasea en una alfa como ella, la sangre de lobos blancos corre por nuestras venas al final de cuentas. —Yo la cuidare, no te preocupes por eso, mamá— dije mirándolo —Confío en ti— sonrió y volvió con mi padre, el cual nos miró a ambos, indicando que cualquier error cometido sería castigado. —Bien, vámonos— dijo mi hermana, me tomó del brazo nuevamente y me jaló hasta la puerta. Subimos al auto del humano, mi hermana tomó el lugar del copiloto, así que yo subí en la parte trasera. El humano se arrancó y nos llevó hasta su casa, en donde ya la gran mayoría de vampiros y lobos ya se encontraban reunidos, disfrutando del ambiente. El humano se frenó y bajo del auto. Yo por mi parte dude en bajar, pero la curiosidad pudo más y termine bajando. Mi hermana ya se encontraba con su grupo de amigos, ella era el alma de la fiesta. Yo caminé entre las personas, mismas que bailaban y bebían. Llegue hasta un lugar cómodo en el cual poder estar tranquilo hasta que mi hermana decidiera volver a casa. —Hermanito— ella llegó a donde yo me encontraba. —Diviértete un poco— me entregó un vaso de bebida y me puso de pie. Después me llevó hasta el centro de todos y comenzó a bailar. Yo llevé el vaso a mi boca y di un trago, esa bebida era demasiado fuerte. Seguí el juego de mi hermana, bebí todo el contenido del vaso, eso me mareo ya que no era buen bebedor, pero eso era lo de menos. Alguien me entregó un vaso de bebida y lo acepté lo tomé y el alcohol comenzó a surtir efecto en mi. Fui soltándome al entorno y comencé a divertirme, esto se sentía bien. Aliviaba la carga que tenia, las penas se esfumaban. Seguí bebiendo hasta que perdí el control de mi. No supe con exactitud que fue lo que hice, pero a la mañana siguiente desperté en la habitación equivocada, todo lo que había sucedido después del último trago se esfumó de mis recuerdos.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD