Jordan
Pensé que mis opciones se habían acabado.
Estaba dispuesta a obedecer a Alexander sin más remedio hasta que hallé una oportunidad que nubló mi vista. Una estación de policía se divisaba entre el enorme parque frente a nosotros, la única forma de poderme librar de toda esa pesadilla.
Fingí molestia con Alexander y lo desafié unos minutos para ganar tiempo y pensar bien en el proceder que iba a tomar. Para mi suerte, subió al auto primero, en espera de que lo siguiera. Aproveché aquel descuido y corrí tan fuerte como pude, obteniendo una velocidad que hasta ese momento no sabía que tenía.
Empujé la puerta oyendo el sonido de mi propia respiración a causa de la falta de aire, muchos de los policías dentro se sorprendieron al notar mi ingreso furtivo y la prisa con la que llegué
