Capítulo 33. Me temo que vamos a vernos con frecuencia, Marco. Salvatore lanzó una sonrisa amarga, cruzándose de brazos mientras bajaba la voz, inclinándose levemente hacia Marco, había querido provocarlo y al recibir esta pregunta consiguió la respuesta que quería, Marco Olivari todavía estaba interesado en Luciana Novoa. -- Digamos que ella tiene un talento único para hacerme la vida… interesante – murmuró Salvatore, sus ojos se desviaron hacia Grazzia, al oírla reír y ver como conversaba feliz con unos empresarios, teniendo a Teodoro Cerdeña de pie a su lado, completamente ajena a todo lo que ocurría entre su hermano y él. Furioso, volvió a mirar a Marco con frialdad. -- Pero es claro que tu hermana menor no se enteró de tu comportamiento con la familia Novoa; de otro modo, creo que

