Capítulo 35. ¿Crees que realmente vendrá por ti? En los días siguientes, los movimientos de Salvatore y Grazzia fueron casi imperceptibles para quienes los rodeaban, pero la tensión entre ellos comenzó a sentirse en los círculos empresariales. Salvatore había dado instrucciones cuidadosas para filtrar ciertos documentos privados y accesos en sus movimientos importantes, todos con datos falsos y de poca relevancia, pero lo suficientemente convincentes para captar la atención de alguien con intenciones ocultas. Sabía que, si Grazzia tenía interés en hundir a su empresa o quitarle algún cliente potencial, encontraría la manera de tener esa información en sus manos. Era solo cuestión de tiempo para hacerla caer en su trampa. Por su parte, Grazzia se sumergió en cada detalle de la empresa de

