Fabián. La completa oscuridad no es la ausencia de los rayos de luz, sino aquella en la que la luz desaparece completamente de tu vida, pero a veces uno mismo se tapa los ojos a la fuerza y se obliga ser un completo ciego en esta vida, y ese era yo. Quizás el que todo cambiara cuando entré al mundo de los problemas y el peligro (admito que fui yo el que lo busqué), te resignaba a que ya no estuvieras caminando por las calles de mi pueblo sin cuidado, porque tendría que tener otros dos ojos en mi espalda para saber si alguien venía a joderme o no. El hecho de unirme a mí mejor amigo Daniel junto con sus otros amigos a su grupo de motociclistas, fue otras de las cosas que nos llevó a ser el enemigo de los Biderboys, donde un encuentro casual se volvió en un enfrentamiento en el que ellos