NARRA OMNISCIENTE.
La mafia siempre ha sido un lugar cruel, un lugar donde las peores personas se encuentran, un lugar en el cual se puede apreciar el arte de la seducción, la vanidad, la crueldad humana, la sangre, el sufrimiento, lo maquiavélico y lo inhumano. Muchas personas intentan entrar en este mundo, pero fallan en el intento, se desgarran, la esperanza se muere y con eso llega el dolor, la sangre y, por último; la muerte.
El infierno está en la tierra…
Todo lo desagradable se encuentra en ese lugar, la vanidad, la lujuria, el deseo, la obsesión, la locura, son una de las tantas cosas que se pueden encontrar en ese lugar. En la mafia no se permiten personas débiles, cobardes y sin el deseo de cometer las peores atrocidades que puede hacer el ser humano.
Son la cosa más repugnante que pudo hacer el mundo…
Los seres humanos se matan entre ellos, no importa que ni quién seas, te terminaran devorando como los animales salvajes. En este mundo existen personas malas y personas buenas, personas que creen en la esperanza y personas que matan para complacer sus más bajos deseos, personas religiosas, personas que no creen, personas que son capaces de quitarte lo que más amas. El ser humano no tiene piedad, no tiene sentimientos, hasta la persona más pura es víctima de las peores crueldades, porque de eso se trata, vivir bajo tu propio riesgo, gozar del pecado, arrepentirte en la muerte, y por, sobre todo demostrar que hasta la más hermosa flor puede llegar a dañarte con sus espinas.
Todos fuimos una flor, pero con el tiempo nos marchitamos y cuando volvemos a crecer seguimos siendo bellos, pero con espinas que con tan solo un error te llevan a la muerte más cruel.
Una belleza que mata…
El dolor es algo que los seres humanos no podemos evitar, no temas cuando las cosas te vayan mal, debes de temer cuando todo te va bien, las buenas cosas alejan a las pesadillas tan solo un rato.
El infierno es eterno y el paraíso momentáneo…
La avaricia reina en este mundo, todos quieren más y más, nadie se contenta con lo que tiene. Y para que contentarse, si cada día podemos tener más, dinero, mujeres, armas; todos los placeres de la vida.
En la búsqueda de poder, el ser humano lastima a las personas que aman, sin piedad y sin temor, una vez que consiguen lo que quieren piensan que las cosas seguirán igual.
Que equivocados están…
Mi desprecio a la humanidad es tan grande, que podría compararlo con eventos históricos que harían que mi desprecio aumente, guerras, tráfico, armas, muertes…
Pero continuemos con la historia…
En algún lugar del mundo existe una organización, la cuál es temida por muchos, a esa organización se la conoce por destruir mafias, engaños, trata, trafico, y por, sobre todo, sus estrictas reglas, aunque no lo crean, es una organización bastante diplomática. En esta organización solo los hombres más fuertes pueden liderar esta organización ¿Y las mujeres? No, las reglas dicen que solo los hombres pueden.
Irónico, verdad. Las mujeres son consideradas estorbo, porque son débiles, frágiles, un solo rasguño y se corrompen. Los hombres de esa organización ven a las mujeres como incubadoras de sus hijos, juguetes sexuales, objeto de burlas y humillaciones.
Cada cierto tiempo muchas mujeres son secuestradas para servir a los hombres, principalmente al líder. Niñas, adolescentes y mujeres adultas, son privadas de su libertad para formar parte de tan desagradable lugar.
El líder puede tener todas las mujeres que él quiera, las mujeres que el elija deben de darle hijos varones al líder, pero ninguna mujer desea darle una hija. Por leyes de esa organización, los hijos varones te dan un estatus mucho más alto, pero una sola hija mujer hace que toda la organización se arrodille, y la mujer que da a luz una hija será nombrada esposa oficial; esposas anteriores siempre son atormentadas para no dar ninguna hija, muchas se suicidan al enterarse que esperan una niña.
Aquella organización es la mafia reinante, los más crueles actos están en esa organización. Nadie puede salvarte si esa organización te captura, mejor prepárate para ser la presa. Si eres hombre serás torturado de las peores maneras, descuartizado, quemado vivo, asesinado, sometido a peleas con animales, hasta pueden llegar a torturarte de forma s****l. En caso que seas mujer, te quemaran viva, te van a descuartizar mientras todavía vives, te mutilaran las partes íntimas, te forzaran de las peores formas; en otro caso tanto hombres como mujeres pueden ser vendidos en subastas, o si tienes suerte y eres mujer puedes llegar a formar parte del harem del líder ¿Condiciones para ser parte de harem? Ser hermosa de forma natural, delicada y lo más importante, ser obediente y sumisa.
El líder actual tiene un total de cinco concubinas oficiales, ninguna de ellas son sus esposas oficiales, porque ninguna le ha dado una hija. La última concubina de nombre Azumi Yakuza, es perteneciente de la mafia japonesa, su padre es el líder de la Yakuza y su madre también es japonesa, pero pertenece a una familia muy importante de Arabia Saudita, su familia materna es conocida por sus negocios del petróleo; proviene de familias bastantes poderosas.
Azumi, entro en el harem por un acuerdo entre mafias, ambas mafias querían paz, entonces al líder de la Yakuza se le ocurrió dar a su única hija al líder de esta organización. Ella le dio cuatro hijos varones al líder, pero en su último embarazo tuvo una hija, eso la devastó y sabía lo que ambas organizaciones podían hacer a su pequeña hija.
-Señora Azumi ¿Que hará con la pequeña? - le pregunto su sirvienta. Ella en el día del parto llevo a su sirvienta más leal en caso de alguna emergencia.
-Akira, llévate a la niña lejos, él no la puede encontrar- Azumi es una mujer hermosa de piel tan blanca como la nieve, ojos oscuros y de unos finos y largos cabellos color castaño oscuro- Llévala lo más lejos que puedas, asegúrate que este con una buena familia, que no le falte nada, que le den amor y salud- lágrimas se deslizan por sus pálidas mejillas- Si el la encuentra nos meteremos en un grave problema.
Aquella pobre mujer está desesperada, la primera concubina oficial la había atormentado durante todo su embarazo para no dar a luz una hija y ahora ella tuvo una. Piensa que va a ser su perdición.
Pero que equivocada esta…
-Señora ¿Qué haremos si el la encuentra? - pregunta con temor Akira, aquella mujer de cabellos castaños y ojos café, tiembla de tan solo pensar de lo que el líder les haría a ambas.
En su larga trayectoria sirviendo a la joven Azumi, y sirviendo a las mafias, sabe que las consecuencias por esta traición son bastante graves.
-Tu no debes preocuparte por eso, encárgate de la niña, cuando termines regresas conmigo- Azumi besa por última vez la frente de su pequeña y le entrega la pequeña a Akira.
No existe un dolor más grande que el corazón partido de una madre que es separada de su hijo. La joven está destrozada por la separación con su pequeña bebé, pero es mejor que crezca con una vida normal a que tenga que cargar con la maldad de esa organización.
-No se preocupe señora, ella será feliz- dice eso con voz quebrada, hace una reverencia y se va.
Akira sale lo más rápido posible del hospital de Tokio, j***n. Va en busca del orfanato más famoso y al llegar ella da las indicaciones y las condiciones de su adopción para que lleven a la niña a otro país, muy lejos del infierno.
Pocos momentos después llega el gran líder, al ver rostro de lamento de Azumi se preocupa y se acerca a ella.
-Mi bella Azumi ¿Por qué estas llorando? - pregunta el líder abrazándola dándole el consuelo que ella necesita.
El ser más despiadado de este planeta es capaz de demostrar cariño por la más bella flor. El líder estaba esperando el nacimiento del bebé, con la esperanza de que por fin la vida le diera una hija mujer.
-Murió...- dice en un lastimero suspiro- Tu hija... Murió...- termina aquella oración y el llanto de Azumi se intensifica. El simplemente la abraza con más fuerza, sin lastimarla, él se mantiene serio, con la mirada más fría que pudiera existir.
-Mi hija murió- es la única palabra que dice. Por fuera parece que no tuviera ningún tipo de sentimientos, pero por dentro él está destrozado, hasta peor que Azumi.
El líder podrá ser la persona más despiadada del mundo, pero su mayor anhelo ya no existe; o eso es lo que cree él. Su primera hija mujer acaba de morir ¿Cómo podría reaccionar ante semejante noticia? Él no sabía cómo sentirse, su primogénita, su deseo más bello se desvaneció en tan solo un segundo.
En cambio, Azumi, finge lo más que puede. Ella sabe que esa acción puede matarla, pero lo único que le importa es el bienestar de su preciosa hija.
Por otro lado, está una persona mirando a lo lejos, un hombre misterioso. El vio todo lo que pasó, desde el nacimiento, hasta la traición y la mentira.
-Azumi Yakuza, te haré pagar todo lo que has y acabas de hacer- dice eso con una sonrisa maquiavélica y se retira de aquel hospital.
La lealtad es lo más importante en la vida…
SOFIA TORALES.
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