EL PRECIO DEL AMOR

Capítulo 3

La atención de José fue desviada de las puertas de vidrio de entrada al aeropuerto por las palabras de Josefa. La vista de Josefa la llevó al vehículo grande y sucio que estaba estacionado frente al Ferrari. El corazón de José comenzó a acelerarse sin siquiera volverse a mirar a los chicos. Ella estaba muy consciente de los hombres que operaban esos vehículos.

Los dos chicos atractivos que conversaban sobre la cama de la camioneta en los lados opuestos llamaron su atención a continuación. Ambos son tan resistentes y atractivos como ese auto. El pasajero del lado del conductor tenía unos 20 años. Debajo de una gorra de béisbol, sobresalía un cabello dorado y rebelde. sin afeitar Los pantalones cortos de carga y una camiseta sin mangas muestran músculos bronceados. aproximadamente seis pies de alto.

El segundo tipo fue el que desequilibró completamente el cuerpo de José. La persona del lado del pasajero que parecía tener una edad similar a la de José. Su cabello era excesivamente largo y casi n***o. Su cara estaba manchada por el valor de varios días de nuca. Sus largas piernas estaban cubiertas con pantalones negros gastados y terminaban en botas negras gastadas, y su bolsa de lona andrajosa estaba sentada en la plataforma de la camioneta al lado de su mano. Su pecho musculoso estaba envuelto en la chaqueta de carreras de motociclista de cuero n***o más sexy que jamás había visto, agregando el toque final de líquido para encendedores en una cerilla encendida.

Josefa dijo en voz baja, refiriéndose al fabricante italiano de motocicletas: "Esa es una chaqueta Brutale". Ella le dio a José una sonrisa. Hay un tema de discusión para ti.

Ella y José habían sido modelos en Venecia por un tiempo, y fue allí donde José vio por primera vez la exquisita chaqueta deportiva de cuero. Pulcro. Equipado. realmente atractivo Costoso. Un poco fuera de lugar con la lona gastada y los pantalones rotos...

Josefa respondió, sonando como si ella tuviera la misma idea, "Tal vez él ganó". "Bueno, en una carrera. O tal vez sirva como modelo de la compañía. Tal vez..."

Las botas también eran para andar en moto, así que tal vez deberías dejar de especular. Ella estaba bien versada en las costumbres y pasatiempos de los chicos que pertenecían al lado oscuro. José levantó las cejas y mantuvo la mirada fija en Biker Boy mientras exhalaba lenta y lentamente. La pasión avivando su sangre y el anhelo creando nuevas conexiones entre las células de todo su cuerpo la dejaron sin palabras mientras trataba de describir cómo "él es simplemente..." "Jeez".

Los chicos miraban a Josefa cuando se reía. José recordó la forma en que ella y Josefa a veces imitaban los movimientos del otro mientras sus cabezas giraban perezosamente. Sin embargo, eran diametralmente opuestos, tanto como José y Josefa. Golden Boy está radiante y feliz. Biker Boy es todo oscuridad y ferocidad.

Golden Boy le dio a Josefa una sonrisa. Parece que alguien está jugando con demasiado dinero.

Josefa dijo, forzando su voz para ser escuchada por encima del ruido y el tráfico que los rodeaba, "Yo compartiré". "Tendré un asiento libre tan pronto como ella se vaya. ¿Deseas montar?"

Él se rió, haciendo un sonido profundo y ronco. Estoy tomado, lo siento, amor.

Todos son excelentes.

José no vio nada; solo escuchó la conversación. Con una conciencia que hizo desaparecer el bullicio del aeropuerto, Biker Boy se había concentrado en ella. Él no sonrió. ni un parpadeo. No... nada. Él simplemente la miró fijamente con el tipo de mirada que la hizo querer empezar a quitarse la ropa y la hizo pensar en las cosas extrañas y sexuales que había visto antes en Stilettos.

No podía ver el tono de sus ojos debido a las pestañas negras que los bordeaban. Su rostro era simplemente deslumbrante, con líneas nítidas y ángulos ideales. Sin embargo, era feo. Indudablemente robusto

Siguió rodeándolo a la vista mientras trataba de recordarlo. Palabras como apasionado, profundo e intrincado que no son del todo descriptivas pero que ella hubiera usado para describirlo me vinieron a la mente.

Josefa murmuró en silencio: "Parece que alguien se ha centrado en ti". "Chica, sal de este automóvil ahora. Está más caliente que la fusión de la energía nuclear. ¿Qué te pasa?"

Continuó, manteniendo el contacto visual con Biker Boy, "Yo... no puedo respirar.

José sonrió cuando Josefa se rió una vez más. Los ojos del hombre comenzaron a cerrarse. Su labio inferior fue tocado por su lengua, y los pulmones de José lucharon por controlar un gemido.

Correcto. Definitivamente, había pasado demasiado tiempo.

Golden Boy le gritó a su compañero desde el otro lado del vehículo, "Amigo". "Hola, hombre. ¿Es esto una pérdida de aliento?"

Biker Boy parecía estar saliendo de un trance mientras sus largas pestañas revoloteaban. Se apartó de José y se concentró en el otro tipo, quien negó con la cabeza y murmuró algo más que José no pudo oír.

Josefa gritó, recuperando la atención de Golden Boy, "Soy Josefa Russo". En el caso de que estés disponible, ya lo sabes".

Biker Boy se alejó del vehículo y del Ferrari, se colgó la horrible bolsa de lona al hombro y entró en la terminal sin darse la vuelta. Su chaqueta tenía una raya alta de cuero blanco en la espalda y letras mayúsculas rojas de hombro a hombro que deletreaban el nombre del fabricante de motocicletas, Brutale.

Esa chaqueta era simplemente impresionante.

Sobre el chico más atractivo...

Luego comenzó a alejarse.

José sintió una punzada de decepción, pero oh, la forma en que se movía: fluido, seguro y suave. Luego, desapareció, dejando a José con un hambre extraña.

¿Es el cantante principal de Hysteria?

Cuando Golden Boy abrió la puerta del conductor del camión, Josefa lo interrogó.

Él sonrió mientras la miraba de soslayo. "¿A él? Es incapaz de cantar por su vida.

Josefa comentó: "Parece familiar".

Golden Boy se encogió de hombros.

¿Él también está tomado?

”

José murmuró: "Josefa".

Chico Dorado radiante. "¿Trolling, hermosa?"

“No pregunto por mí. Ladeó la cabeza en dirección a José y dijo: “Solo tengo ojos para ti.

José captó la atención de Golden Boy y la retuvo. No sintió ninguna de las mismas emociones que la aparición de Biker Boy había hecho correr por su cuerpo. Golden Boy lanzó una mirada rápida a la puerta por la que había salido su amigo antes de volverse hacia Josefa. Actualmente tiene mucho en su plato. Ahora mismo no está en un buen momento.

El hombre giró hacia la manija de la puerta del lado del conductor.

Oye, te ves bien", dijo Josefa.

Se detuvo una vez más después de abrir la puerta.

Josefa dejó escapar un fuerte suspiro. "Nada. Sólo una buena mirada más, por favor. Estoy agradecido. Esta noche, tendré dulces sueños.

La saludó con dos dedos y le dedicó una sonrisa letal antes de subirse a su camioneta. Los dos se saludaron con la mano por las ventanillas mientras él se alejaba, y Josefa suspiró cuando lo hizo.

José le recogió el cabello en un moño, lo recogió en una cola de caballo y se puso el sombrero mientras consideraba cuán rápido una sonrisa y unas pocas palabras podían unir a dos personas. o una mirada. se puso a temblar una vez más al pensar en esa mirada caliente e intensa en los ojos de Biker Boy cuando se encontraron con los de José.

Mientras observaba la camioneta de Golden Boy cruzar la 405, Josefa dijo: "Sabes que él va a pensar en mí cuando se acueste con su chica esta noche". Será su mejor experiencia s****l en meses. Y él pensará en mí.

José hundió su frente en su mano mientras ella cerraba los ojos. Luego se puso de pie y empujó la puerta para abrirla.

Usando el nombre ficticio que José le había dado al hombre en su cabeza, Josefa dijo: "Biker Boy está volando en tu aerolínea". Frecuentemente hacía eso con Josefa. Josefa sonrió mientras se giraba para mirar a José después de examinar su sombrero. "Pero si llevas eso, nunca sabrá que eras el bombón que quería devorar".

Sin embargo, evitará que otros chicos intenten compartir su historia de vida conmigo o solicitar mi número de teléfono.

Josefa agitó las manos. "Ese chico te dio la impresión de que te lo haría en el próximo baño disponible. Encuéntralo ahora. No tendrás que preocuparte de que otros chicos te hablen si todo lo que dices es "sí" durante la conversación.

José negó con la cabeza y colocó su equipaje de mano en el suelo antes de cerrar el Ferrari. “Follar en el baño de un aeropuerto. Ese sería el sueño de un fotógrafo paparazzi, ¿no?”

No hay fotógrafos aquí, Lex. No hay reporteros en su viaje que estén familiarizados con su trabajo o sus clientes. Nadie entre tus clientes lo sabrá jamás. Ese es el atractivo de hacer negocios. Chica, no estaré hablando para siempre. Entiendes que no hablo en serio sobre el baño. Sólo estoy discutiendo un poco de dejar ir.

Dios, ese era un sonido agradable. José tiene un gran deseo de soltar. No había podido hacerlo en lo que pareció una eternidad.

Pero como te conozco, suplicó Josefa, "tómate unos minutos para jugar con mi aplicación y darme tu opinión. Sé que no harás nada más divertido mientras esperas tu avión". El prototipo ahora está en tu teléfono gracias a mí. Voy a construir la aplicación final a partir de ese modelo y quiero que brille cuando me reúna con esos muchachos la próxima semana”.

Esos tipos eran los mejores hombres de la Agencia de Seguridad Nacional. Ese era un grupo de personas muy diferente al que Josefa estaba acostumbrada a trabajar o tratar, pero parecía tan segura como siempre.

“Si me rebajan”, dijo, “haré algunos cambios rápidos y se los ofreceré a Apple y Google para un propósito completamente diferente. Hay una pantalla de instrucciones cuando abres la aplicación”. Ella sonrió. “Pero léelo rápido, se autodestruye en cinco minutos”.

José se rió. “Me matas, tú y tu fascinante mundo. No puedo esperar a ver qué cosas ultrasecretas has escondido en mi teléfono”. José se encontró con la mirada de su amiga. “Josefa, conduce como yo, para mí”.

"Si vas a buscar a Biker Boy, conduciré como tú".

Ella sonrió, no tenía intención de hacer tal cosa, pero dijo: "Trato hecho".

"Una conexión fácil con un bombón anónimo, Lex", dijo Josefa, acelerando el motor, lista para alejarse de la acera. “Mejorará tu estado de ánimo y tus diseños”.

Después de pasar la seguridad, José deambuló por las hileras de tiendas y restaurantes en los pasillos del aeropuerto y se detuvo en Hudson News para comprar una botella de agua y una revista. Pero sin nada interesante que ver y sin más avistamientos de Biker Boy, plantó su patético trasero en un rincón tranquilo en su puerta.

En lugar de sacar su bloc de dibujo, como solía hacer cada vez que tenía un momento libre, José se quedó mirando la revista que había recogido. Y sonrió. Esta no era la primera portada que uno de sus diseños había adornado, pero esta fue la portada y el diseño que había llevado a Martina Galliano a visitarla. Y José se había emocionado al encontrarlo en el quiosco. No había pensado que vería la distribución general hasta dentro de tres o cuatro días.

Dos hombres entraron en el área de descanso abierta del área charlando, y sus voces profundas llegaron a José. Reconociendo el uso de terminología periodística, José los miró por debajo del ala de su gorra. Reconoció a un hombre como escritor de la sección de Estilo del LA Independent, pero no al otro, y se relajó cuando se sentaron en otra fila de asientos de espaldas a ella.