Capítulo 1

1838 Words
¿Alguna vez has pasado tanto tiempo en la cama que te agotas de estar acostada? Son como las 3 de la mañana o un poco más, los programas que pasan por la televisión son la repetición de los que vi en el horario de la tarde y aunque son graciosos ya no es lo mismo si se repite, eso se debería volver mi mantra de vida. Creo que dar segundas oportunidades esta sobrevalorado, es como dar carta abierta a las personas a que te hieran y vuelvan con cara de arrepentidos a terminarte de herir. Claro que una cosa es pensarlo y otra llevarlo a cabo realmente, a él le di bastantes oportunidades. -¿Estás despierta?  Tecleo en el celular con sumo cuidado de no hacer mucho ruido, mis padres detestan que me mantenga despierta tan tarde en la noche y no quiero enojarlos, los últimos días he sido tan molesta que no se aun como no me han echado de casa. -Chloe son las 3:00 am ¿que haces despierta tan tarde? El mensaje de Annie no demora ni un segundo en llegar, soy consciente que es demasiado tarde para escribirle por w******p a cualquier persona, pero bien podría dejar el celular en silencio y contestar al siguiente dia, de hecho es casi imposible que Annie se despertara por un simple tintineo de la aplicación lo que quiere decir que tampoco estaba dormida. -También estás despierta ¿no puedes dormir? o ¿no quieres dormir? No se si somos tan amigas y eso hizo que nos partieran el corazón al tiempo o solo somos igual de tontas al escoger nuestras parejas. -No estoy segura ¿lo estas pensando? Que clase de pregunta es esa, llevo 32 días con él en mi cabeza, no todo el tiempo pero definitivamente siempre está presente. -Es lo que intento evitar ¿como te sientes? Supongo que ahora me corresponde a mí contestar con preguntas tontas y obvias, se que no está bien ,nadie esta bien despues de una ruptura, lo se porque lo siento, pero así también se lo lindo que es cuando alguien te pregunta como estas, porque te están haciendo una invitación a que te desahogues a que saques todo lo que sientes aunque eso implique que por horas envíes los mensajes más tristes del mundo. Annie se demora en responder, puede ser porque a podido conciliar el sueño o porque al pensar como se siente entro en esos episodios donde miras el techo buscando una respuesta de todo el remolino de sensaciones que tienes encima, no sabe cómo se siente ni siquiera se como me siento yo.  Mientras espero a que responda, releo las demás conversaciones. La mayoría son mis amigos preguntando cómo sigo, mi papá enviando cadenas y memes pero hay una que no me atrevo a abrir, en la parte inferior de todos los chats aparece ARCHIVADO(1) lo puse ahí porque no quiero abrirla en un momento de debilidad y escribirle , o peor aún, terminar leyendo esos mensajes que datan de hace más de tres años pues nunca en ninguna discusión fui capaz de borrar la conversación con él, jure que siempre lo arreglariamos todo y tener la prueba de cuando empezamos a enamorarnos era lo mas tierno del asunto. Aun no me atrevo a borrarla aunque lleve un mes sin escribirle , lo he intentado varias veces pero no soy lo suficientemente valiente para dejarlo ir totalmente, tener esa conversación es como mantenerlo conmigo así sea en una pequeña proporción , es de esas cosas que no puede llevarse que no puede quitarme, de las pocas cosas sobre las que tengo el control de decidir si se queda o no y por ahora se queda. Siento los párpados pesados y el cansancio me invade sin embargo no suelto el móvil, quiero quedarme dormida con la mente ocupada, si cierro los ojos dispuesta a descansar se que terminaré pensando en él y no me gusta pensar en él cuando no puedo distraerme en otra cosa realmente no me gusta pensar en él en ningún momento pero puedo controlarlo en otras situaciones. La luz se hace más tenue y la imagen de la pantalla cada segundo se torna más borrosa me estoy durmiendo y solo puedo pedir antes de caer totalmente inconsciente que esta noche no sueñe de nuevo con él.  . . . . . . Hay algo que me lleva incomodando unos minutos , lo suficiente como para despertarme, el celular está vibrando como loco con una melodía ridícula que no se detiene y este se encuentra en algún lugar entre mis cobijas y mi colchón, no recuerdo haber programado alguna alarma, ni siquiera he abierto aun en totalidad mis ojos aunque puedo reconocer los rayos de luz que se están filtrando por las cortinas que cubren la ventana. El sonido sigue al punto de obligarme de buscar el aparato entre las sábanas y cobijas desordenadas sobre mi cama, cuando por fin lo encuentro entre las almohadas el sonido se ha detenido , lo reviso y me doy cuenta que tengo mas 4 llamadas perdidas de un número desconocido, reviso el numero por si depronto lo relaciono a alguien de quien borre de mis contactos o algun numero perteneciente a empresas que llaman para ofrecerte algun plan de datos de internet y minutos o alguna suscripción a alguna cuenta bancaria. Da igual después de 5  minutos no han vuelto a llamar, reviso la hora que marca las 9:20 am haciendo cuentas he dormido como 6 horas y unos minutos , sin embargo me siento tan agotada como antes de caer dormida creo que más que corporal es un agotamiento emocional , es como si a mi alma le costará seguir lo siento así, me siento enferma. Como cuando tienes un resfriado donde no tienes energía de nada , no tienes apetito , constantemente tienes frío todo el tiempo, no importa que tantos medicamentos utilices no te sientes totalmente bien hasta que la causa del resfriado se va ya sea una bacteria o un virus o cualquier cosa, la única diferencia es que mis sintomas son porque se fue no porque este, no puedo esperar a que un dia se me pase porque se eliminará la razón de mi enfermedad , la razón de mi enfermedad es porque no está. -Chloe ¿estás despierta?  La voz de mi padre me saca de mis pensamientos , está llamando a la puerta con cuidado como si temiera que aún este dormida. -Si pa, ya desperté Grito sin abrir la puerta, en los últimos días mostrarme tan vulnerable me avergüenza, incluso con las personas que han estado conmigo siempre y me  han aguantado bajo cualquier circunstancia, pero no puedo evitar apenarme por sentirme tan mal cuando se que alrededor del mundo hay muchisimas mas personas con tragedias más terribles que siguen adelante y no se están revolcando en su miseria. -Te hice té en leche, esta listo en la cocina Sonrío porque definitivamente tengo a los mejores padres del mundo. -Ya salgo pa Escucho cómo sus pasos se alejan de la puerta de la habitación, rápidamente me hago una coleta con el desorden de cabello que tengo, arreglo las sábanas y cobijas de mi cama, y salgo de la habitación.  Desde el pasillo puedo escuchar la voz de mi madre hablando con mi padre , no debo esforzarme para saber que el tema en discusión soy yo, ultimamente mi rutina diaria les preocupa y no puedo culparlos ver como su hija se derrumba en un segundo debe ser complicado y aunque son bastante comprensivos no puedo seguir siendo una bola de depresión que no busca solución. Estoy cansada de ser la víctima frágil a la que temen hablar muy duro o decir verdades porque me rompa, es cierto que me siento rota pero no por eso todo el mundo debe darme un trato preferencial , la vida sigue y yo debo hacerlo con ella. -Buenos días a todos  Mis padres dejan su discusión en susurros para mirarme los dos con ternura, ninguno lo dice en palabras pero no son necesarias porque sus rostros son capaces de decirme ¿ya estas mejor? y con todas mis fuerzas trato de decirles que si con mi mirada aunque los tres sabemos que no es cierto. -Si no llegabas en los próximos minutos, el té se enfriará  Mi madre termina su café sin embargo no se aparta de nosotros, me siento en los bancos que están en el mesón de la cocina, donde nos ubicamos para hablar de cualquier cosa aunque ultimamente lo unico que hay entre nosotros solo hay silencio, y lo detesto. Quiero hablarles contarles cosas como antes reirme como antes pero no puedo solo no se que decir, nada se me hace interesante o divertido solo no encuentro palabras. El té aún no se enfría aunque han pasado varios minutos , sigo sentada viendo como en el reloj de la cocina pasa el segundero y un poco más lento el minutero. En qué momento dejé que mi vida dejara de serlo, no me gusta solo sobrevivir no quiero continuar así, y aunque no soy tan creyente como debería para pedirle algo a Dios lo hago, le pido a Dios que me mande una señal, que me de un cambio que me permita salir de este hueco en el que me siento porque no quiero arrastrar a los que quiero conmigo aunque ya es un poco tarde. -Chloe ¡el teléfono! Escucho la voz de mi hermana que viene corriendo atravesando el pasillo, con mi móvil en sus manos agitandolas con desespero, alcanzó a divisar a mi celular con la pantalla brillante y de nuevo el sonido molesto que me despertó. -¿Hola? Contestó la llama con tono dudoso, cuando mi hermana me entrego el celular ya habia contestado y no alcance a ver quien era el remitente.  -Buenos días ¿hablo con Chloe Mathews? La voz que escucho en la bocina es desconocida para mi, aunque es una mujer no tengo idea de quien podría ser. -Si ¿quien habla? Estoy preparada para escuchar el super plan de telefonía que están por ofrecerme cuando menciona algo totalmente distinto   -Señorita Chloe le habló de las oficinas del banco Central, hemos recibido su hoja de vida, nos gusta su perfil y al ser recomendada directa del Doctor Scully, queríamos que usted se presentara en los proximos dias para ser participe del programa de pasantes de contaduría que ofrece la corporación... Se que sigue hablando , lo se porque la voz un poco chillona de la mujer no se detiene pero escuche lo suficiente, le pedí a Dios un cambio y no se si siempre conceda todo tan rápido , ni siquiera se si es un favor de Dios o es acaso el destino , no me importa es el camino para cambiar y lo haré, por mi madre que no es capaz de contarme nada por miedo a decir algo que me haga recordarlo , por mi padre que aunque detesta hervir la leche todas las mañanas lo hace porque ahora no me siento preparada para tomar café como lo hacía antes, por mis hermanas y amigos y todo, por mi. -Acepto  Ni siquiera he dejado que termine sin embargo siento que debo contestar antes de que me arrepienta o me llene de dudas y temores, debo tomar la oportunidad por mi misma y salir adelante.
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