Capítulo 7 Collar

1990 Words
Estaba molesta o más que eso, sentía que la sangre me hervía que cualquier cosa me haría explotar, quería sacar lo que tenia adentro, esa furia que invadía todo, solo si golpeaba a alguien me desharía de ese sentimiento y esa persona ya estaba muerta quemándose en el infierno. Quería llorar y el nudo en mi garganta me indicaba que en cualquier momento las lágrimas saldrían. Pensé en todos esos momentos en que estuvo con nosotras, nunca vi nada sospechoso, aunque era muy dura conmigo en los entrenamientos nos cuido como si fuéramos sus hijas. Busque en lo más profundo de mis recuerdos alguna pista que me dijera que nos odiaba, no encontré nada. Busque es las conversaciones algo que dijera que todo estaba planeado pero seguía igual, un dolor de cabeza se disparo asta el punto de tomar mi cabello con mis manos. —siempre fue así — apenas escuche a Dimitri —sus planes son tan perfectos que no deja ni pistas, ni pruebas. —trate de ignorar el dolor y prestar atención a sus palabras —es una maldita para manipular —escupió con rabia. —¿Qué le hizo a tu hermana? —Atina preguntó, después de su silencio decidió participar. —nada que te incuba mocosa — el me miró con el entrecejo fruncido —me recuerdas a alguien, pero no se a quien. —¿Por qué tres años? —susurro Xander —¿Por qué esperar tres años? —hablo más fuerte girando su cabeza para mirar a Dimitri. —¿Cuántos años tienes? —ignorando la pregunta de su amigo me miró y sentí que buscaba algo dentro de mi—¿ocho?, ¿nueve? —tenemos ocho — respondió Atina —tome de su mano ella era tan confiada —Estaba esperando que cumplieras los 10 años es cuando nuestra magia, nuestro poder florece. —Gladis mencionaba eso con frecuencia, nunca entendí por qué lo decía. — Ustedes obtienes a sus lobos al cumplir 18 años, nosotros obtenemos el máximo poder a los 10. —mire a Atina cómplice de ese secreto que ella ocultaba. —¿Cómo es…? —Atina estaba por preguntar algo cuando escuchamos unas llantas quemar y el impacto de algo. Xander perdió el control del auto, haciendo zigzag por la carretera asta que logró detenerla, nosotras gritábamos tan fuerte que Dimitri tapo sus oídos gritándonos que nos calláramos. Por la oscuridad no lográramos ver nada pero sabíamos que la camioneta que nos impacto había volcado, era donde viajaba mi tío y alguno de los guardias que acompañaban a Xander. Los cuatro bajamos de inmediato, lo que presenciamos fue la pelea de cinco Lobos, cuatro contra uno era injusto, pero sabía cómo dar batalla, mi tío había despertado y me emociono verlo pelear como si no hubiera estado en coma. Cuando iba hacia el lo vi retorcerse, un chillido salió de su trompa, mire a la persona causante de eso —¡déjalo! — grite a Dimitri quien tenía los ojos dorados. —Te dije que lo dejes —lo mire desafiante. Levanto ambas manos mientras torcía los ojos—El lobito despertó — dio la vuelta y se alejo un poco del auto. Dimitri corrió donde se encontraban sus guardias que ya estaban convertidos en humanos, su traje estaba intacto, mi tío ya hacía en el suelo completamente desnudo. —Tratamos de controlarlo — dijo uno de sus guardias mirando la mordida en su brazo que se iba curando poco a poco. —se volvió loco preguntando por la bruja. Atina tomo mi mano —Esta bien—grito emocionada — despertó —dijo jalándome para llegar donde el. Mientras el seguía en el suelo nos llamó —¿Lea?, ¿Atina? — su voz apenas fue audible —¿niñas? —volvió a decir tratando de ponerse de pie. —aquí estamos tío — Xander nos detuvo, mientras que uno de sus hombres le entregaba ropa a mi tío. —vístete —Ordeno Xander, dándonos la vuelta. Los guardias tuvieron que quedarse a esperar que otros pasaran por ellos, mientras Xander, Dimitri, Atina mi tío y yo viajábamos en el auto poniéndolo al día. —Desperté en esa habitación, tu estabas inconsciente y vi como ella usaba su magia invocando a los espectros del Pantano —nuestros rostros palidecieron, quien invocada a los espectros entregaba su alma. —comencé a tener una batalla con ella pero estaba tan débil que lo último que recuerdo es ver como levitabas. —¿Qué me hizo? —dije en voz alta, provocando que todos voltearon a verme sin decir nada. En las siguientes horas no hubo más preguntas nos dedicamos a dormir, todos estábamos cansados. Me acomode en el brazo de mi tío y Atina se acomodó sobre mi, me sentía feliz de que el estuviera con nosotras nueva mente y ahora esa bruja no existía. ◇◇Xander◇◇ Solo teníamos la misión de reclutar a los de nuestra especie y me topé con esa bruja, que hace que casi pierda a mi mate, al verla recordé todo lo que nos hizo sufrir, quería arrancar su cabeza y agradecí cuando Dimitri la tomo por el cuello casi asfixiándola. El Rey le perdono la vida a lo que nunca estuve de acuerdo, fue desterrada con la condición de nunca volver a usar su magia, gracias a una amiga sus poderes fueron encerados en ese collar. Mi pregunta es ¿Cómo lo obtuvo?. Frente a las niñas no quise preguntar nada a Gabriel, habían cosas que nadie podía saber. —¿Dónde esta tu hermana? — pregunto al ver que las niñas estaban dormidas. —Encontró a su mate, se caso con el y se fue a vivir cruzando las fronteras. —dijo mirando a su sobrina —Lea es su hija. —mire a Dimitri confirmando nuestras sospechas. —¿te hablo sobre Gladis? —Estaba seguro que no sabia nada, si estuvo conviviendo con esa bruja era por que estaba ignorante de lo que paso. —Perdí contacto con ella desde que el Alfa David me puso a cargo de los guerreros —sus ojos se entristecieron aunque trato de ocultarlo —mi madre... — miró a la ventana mientras sus ojos se oscurecía y su semblante cambiaba. —¿No eres su beta? —pregunto Dimitri con los ojos cerrados —tienes la fuerza y el porte de uno—Por desgracia Gabriel no tuvo la dicha de conocer a Dimitri — Tan poco cosas somos para Altagracia que no te menciono sobre mi —sonrió con arrogancia, mientras yo negaba —sobre lo bien que la pasamos, es muy desconsiderado de su parte— por el retrovisor observaba la expresión de Gabriel si no fuera por que sus sobrinas estaban sobre el se hubiera lanzado a Dimitri. —Has oídos sordo a los comentarios de Dimitri, le gusta hablar de más —golpee el hombro de el haciendo que abriera los ojos —deja de decir estupideces, Altagracia con la ayuda de Dimitri y otros hechiceros la despojaron de sus poderes —Dimitri levantó el collar que usaba Gladis —con un ritual muy antiguo ocuparon el collar que tu hermana le dio para guardar toda esa magia. —Altagracia lo mantendría lejos de ella, no sabemos como lo recupero. — hablo Dimitri guardando el collar. —Mi hermana — paso la mano sobre su cabello —Lea vio ese collar, le grito que lo había robado y yo le dije que no era así, que mi hermana se lo había dado. —sus ojos cambiaron de color era su lobo queriendo salir —La asesina de ni hermana estaba frente a mi y no me di cuenta. —¿Altagracia esta muerta? — preguntamos impactos por la noticia, los recuerdos volvieron a mi cabeza y vi esa sonrisa que ella poseía una tristeza me invadió y vi como Dimitri palidecía. —El día en que me di cuenta que Lea era la hija de mi hermana y que había huido, salí de las fronteras a buscarla tenía más de 10 años de no saber de ella, lo último que supe fue que esperaba un niño. —niña— corrigió Dimitri —niño, esperaba un niño; Lea tiene un hermano mayor, el caso es que lo que vi… — se detuvo por un momento cerró los ojos respirando hondo — los asesinaron — Gabriel comenzó a llorar al igual que Dimitri, Altagracia siempre lo apoyo y le enseñó todo lo que el sabe. —no le quise decir a Lea por no hacerla sufrir, ella tiene la esperanza de que volverá a verlos. —Debí matarla con mis manos — se quejo Dimitri con demasiada furia en sus ojos —Maldita bruja te buscaré en el infierno y te torturare. —¿Cómo usaba magia si la despojaron de ella? —usaba la de tu sobrina, esas pulseras no eran para controlar su poder ni ocultar lo que era, al parecer descubrió la manera de obtenerla sin llamar la atención. —Hablo Dimitri tomando unos bocadios de su mochila, que estaba en la parte de atrás por los pies de las niñas. —Gabriel cuando dejaste el Reino muchas cosas pasaron, creí que Altagracia te informaría de todo — comencé a contarle todo lo que paso, lo que su hermana hizo por él reino y por mi mate, el estaba consternado por todo lo sucedido y a la vez estaba siendo consumido por la ira. —Si mi hermana me lo hubiera dicho jamás hubiera permitido que se acercara a las niñas. —se sentía culpable de haberle entregado a su sobrina en bandeja de plata —¿Por qué se comporto tan buena? — pregunto sin entender al igual que su sobrina tenia la misma mirada esas dudas que a ella la consumían. —te diré lo mismo que le dije a la mocosa — hablo Dimitri con la boca llena — esperaba que cumplieran los 10 años. —quería hacer lo mismo que mi hermana hizo con ella — abrió los ojos sorprendido — ¿Por qué desea tanto poder?. —deseaba, la perra esta muerta —Dimitri volvió a corregirlo —siento que fue muy fácil acabar con su vida, ¿Cómo consiguió el collar? Altagracia es una de las hechiceras supremas —el tenia un buen punto algo que no había pensado. —su plan no salió como esperaba — dije buscando una respuesta a su pregunta —no esperaba que llegáramos. —Lea tiene un sello — hablo Gabriel — es lo que Gladis decía. —Altagracia sabía que la buscaría — comenzamos a pensar en todas las posibilidades de por qué de todo, llegando a la conclusión que ese sello protegió a Lea del espectro. El sol estaba por salir y poco a poco fui cerrando los ojos, cambien de puesto con Dimitri ya que el había descansado un poco, ahora era mi turno. quedaba pocas horas para llegar a Madrisca necesitaba hablar con el Rey sobre las posibilidades de que Gladis sea la causante de la guerra que se avecinaba. Soñé con esos tiempos donde aún Altagracia vivía con nosotros recuerdo el día en que llegó buscando asilo por ser una hechicera, su manada la desterró solo por ser híbrida se convirtió en nuestra mejor amiga ella debió quedarse con nosotros, nunca debió irse. No todas las manadas estaban de acuerdo con el Rey, pero mientras no rompieran ninguna regla la alianza los protegería de cualquier ataque. Y la manda de sur rompió varias reglas algo que no le gustaría para nada a Adolfo, estaba seguro que le quitaría el cargo al Alfa David y se lo daría a su primogénito. Una guerra con los vampiros se aproximaba, sumándole la falta de valores que poseía el Alfa David, lo sucedido con Gladis que más desgracia hacían falta.
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