Suyo.

Capítulo 1.

Aura diez años.

Bien, todo está en orden, terminó de meter las cosas en mi mochila para luego colocarmela en la espalda, me acerco al espejo empotrado en la pared para amarrar mi cabello.

Lo hago varias veces hasta que esté tal cual mi mamá lo hace.

—Bien, todo tiene que salir perfecto, hoy es el día.—Me ánimo.

Doy media vuelta observandome.

Estoy linda.

Vamos Aura, hiciste todo este plan.

—¿Están listas? —Hablo por nuestro link con Alana, Clara y Cleir las gemelas.

—Perfectamente, Alan tiene todo listo, Elijath no sospecha nada—

Sonrió orgullosa.

—Bien —

Camino hacia mi puerta y la abro, al salir las puertas de las habitaciones de mis hermanos se abren y se apoyan en el marco, me recuesto en mi puerta observando a ambos frente a mí.

—¿Tienes todo listo, pequeño demonio? —

—¿Estás seguro de esto maldad encarnada?—

—Mamá ya les ha dicho que no me digan así—

Me cruzo de brazos observándolos, ellos se miran y niegan.

—Eres un pequeño demonio —

—También la maldad encarnada, no pidas que cambiamos como te vamos a decir, solo decimos la verdad .—Mi hermano Bastian bosteza, se acerca a mi y su olor me hace suspirar.

Me agrada mucho, el huele como mamá, papá y mi hermano Demian tranquilidad, hogar y amor.

—Diviértete, pero no hagas muchas locuras, basta y sobra con la que harás —

Deja un beso en mi frente, me da una palmada en la cabeza y se da vuelta y vuelve a bostezar metiéndose a su cuarto.

Mi hermano Bastian que aunque no sea mi hermano de sangre, lo amo como mi hermano, además él huele como mi familia, familia de sangre.

—No hagas más locuras.—Demian se acerca y me abraza —Controla tu hiperactividad, no vuelvas loco a Elijath ¿Ok?—

—Ok, controlar mi hiperactividad, no volver loco a Elijath, anotado—

—Bien.—Me da una palmada en la cabeza al igual que Bastian y se aleja adentrándose a su cuarto.

No haré locuras, solo quiero que ese tonto me trate igual que trata a Alana y las gemelas ¿Es tanto pedir?

El olor de mis padres me hace acelerar, voy a asustarlos, brincare encima de mi padre.

Me asomo un poco, pero mis deseos se esfuman al ver cómo ambos me regalan unas enormes sonrisas.

Empiezo a caminar haciéndoles un desfilé.

—Estas hermosa —

—Gracias papá.—Me lanzó a sus brazos dejando un beso en ambos.

Miró hacia la derecha observando una lonchera en la mesa.

—¿Esa es la comida? —Mi mamá asiente y me emociono aún más, no puedo creer que por fin emplearé mi plan, estoy emocionada, él tonto de Elijath no me dejó más opciones—Gracias mamá —

Tomó la lonchera emocionada, pero siento el cambio de ambiente, el olor de mi padre cambia.

Preocupación y celos.

—Aura .—Miro a mi madre intenta —No hacer locuras, si las cosas no salen como deseas das marcha atrás —

Lo mismo que mis hermanos, deberían tener un poco más fé en mí.

Mamá me ha repetido lo mismo desde hace dos meses que hasta puedo resistirlo, desde que en la clase de naturaleza la maestra habló sobre una excursión y que irían Félix y Elijath no dude en crear el plan de perderme en el bosque.

Porque aunque el tonto lo niege, él siempre me está vigilando, aunque diga que le molesto, siempre vela por mi seguridad.

Nunca he conocido un lobo tan raro, testarudo y extraño como él.

—Y si las cosas salen como están en el plan, que si saldrán, siempre hacer lo que él tonto diga.—Mi padre sonríe orgulloso al ver cómo lo chamo, se que son amigos, Elijath es el mejor amigo de mi papá, pero a veces pareciera que lo quiere matar —No molestarlo mucho y siempre estar cerca de su radar—

Mamá sonríe orgullosa besando mis manos, su olor agradable me hace sonreír más.

Mamá huele a paz, paz absoluta.

—¿Estás lista? —

—Si, estoy emocionada —

—Portate medianamente bien ¿De acuerdo?—Papá estira su dedo meñique y lo tomó, lo movemos de arriba, abajo y luego nos soltamos haciendo una promesa.

—Nos vemos .—Me doy la vuelta y cuando estoy llegando a la puerta me devuelvo para darles un abrazo y un beso en la mejilla a ambos.

Abro la puerta de mi casa emocionada, camino a pasos rápidos sosteniendo por los lados mi bolso.

Bien, también estoy un poco nerviosa, solo un poco.

Soy una niña de diez años que ideo todo un plan solo porque un tonto lobo no le presta atención, estoy siendo infantil, pero se vale aún soy una niña.

Corro cuando veo a Alana y las gemelas.

—Hola .—Me agacho tomando aire.

—Tardaste .—Clara me extiende un mapa—Por aquí te tienes que ir .—Me muestra una ruta que se aleja del lugar donde iremos de excursión.

—Gracias Clara .—La abrazo.

—Sé que soy la mejor .—Ella me sonríe con las mejillas sonrojadas.

—Ten .—Cleir me extiende una linterna—Creo que deberías llevar tres mejor, traje más—

—Trajo todas las que estaban en la casa.—Me susurra Clara ganándose una mala mirada de su hermana.

—Gracias Cleir .—Me doy la vuelta dándole la espalda, ella mete las linternas en mi mochila.

—Listo —

—Yo te traje más cosas de primeros auxilios, se que dijistes que tenías suficiente, pero no es malo tener de más —

Ella me hace rodar y abre el bolso, hago una mueca al sentir que el bolso pesa más.

—Lo hacen ver cómo si se fuera por una semana .—Alan llega y le coloca el brazo a su hermana.

Aunque ambos sean más grandes que nosotros, Clara, Cleir y yo, siempre están al pendiente nuestro.

—No puedo creer que estamos cooperando con algo como esto, se supone que somos los mayores —

—Hermano tu mismo lo dijiste, se supone.—Alana se aleja de él dándole por el estómago.

—¿Y eso porque? —Lo mira desde el suelo.

—Me alborotaste el cabello animal .—Alana se arregla el cabello.

Ella rápidamente cambia y sonrió al ver a Félix a lo lejos, Alana no le quita los ojos de encima.

—Lo vas a desgastar hermana .—Alan se burla.

—Callate, miren ya están por irse —

—¿No irán? —Les pregunto.

—Papá al final nos dió más trabajo—

—Tu cállate, yo tengo más por ser él mayor.—Alan se queja y Alana le saca la lengua divertida—Si no se apuran los dejarán—

—Adios .—Clara y Cleir toman mis manos y salimos corriendo, pasamos por el lado de su hermano mayor que nos mira con suspicacia.

—Aura .—Me detengo abruptamente, ocasionando que las gemelas casi se caigan —Ten.—Me extiende un repelente.

—Gracias Matteo.—Lo tomó él niega y sigue su camino hacia los hermanos que me imagino que siguen peleando.

—¿Clara, Cleir, Aura? —

—A…Aquí .—Decimos las tres al mismo tiempo casi sin aire —Ya estamos aquí —

Félix nos da una mirada y sonríe levemente, se aleja acercándose a Elijath que se mantiene al margen un poco alejado de nosotros.

—Ya saben, no deben alejarse de nosotros, si ven algo extraño notificarle a un superior, siempre estar cerca del grupo o de un líder de grupo.—La maestra empieza hablar, mantengo mi vista en ella, pero mis pensamientos están en otro lado.

¿Funcionará?

Vamos Aura, no te acobardes, eres una niña valiente.

—Bien, empecemos —

Seguimos a la profesora, cada superior y líder de grupo a nuestro lado, miró hacia los lados con el ritmo cardíaco acelerado. Controlate, si sigues así, él se dará cuenta que hay algo raro.

—Ten .—Clara me extiende un caramelo que no dudo en tomar.

Meto el envoltorio en mi mono y sigo el camino y poco a poco me tranquilizo.

Al ver cómo Felix llama a todos los superiores, líderes y a la maestra me doy cuenta que es mi momento y más al divisar la entrada por la que debo irme.

Doy una rápida mirada hacia todos lados, Clara y Cleir me miran para luego seguir el camino empezando a hablar un poco más alto, y rasgando algunas flores para que mi olor se confunda con el de ellas.

Doy un paso atrás y luego otro y otro, hasta que me encuentro lejos del grupo.

Miró el camino y suspiró.

—Vamos Aura, tu puedes, que comience el juego—

Doy un paso sintiendo mi corazón agitarse con fuerza.

Estoy nerviosa, el inmenso bosque se alza ante mí llenándo me de miedo, pero soy una loba, una alfa, no debo acobardarse, la naturaleza es parte de mi.

Todo una reparación profunda inflando mis cachetes, llenando mis pulmones de aire

Muevo mi manos dejando mi olor impregnado en los árboles como mi madre me enseñó y pisó varias veces tal cual mi padre dijo.

Bien, así él podrá seguir el rastro.

Porque si, estoy segura que él tonto me seguirá.

Que la diversión empiece.