CHARLENE
Tenían un mes sin hablar con Daniel desde que lo dejé aquel día, las cosas con James seguían igual, seguía con su misma actitud hacia mí y hacia todos los que vivimos en esta casa, pero tratamos de ignorarlo, lo único que cambió fue que ya asiste al colegio, su castigo dentro de casa y la escuela aún permanece, Carter sólo lo vino a ver una vez más, le regreso el móvil que tenía anteriormente, el jodido cabrón se lo dio a escondidas, no fue si no hasta que me di cuenta que por ahí se comunicaban.
Cuando una mañana se fue al colegio, como tampoco tenía permitido usar el celular dentro del colegio, no lo llevaba, así que lo tomé y le llamé a ese idiota.
—¿James, no deberías estar en el colegio?, estoy en un reunión importante – mi enojo se triplicó en un micro segundo.
—Me i
