A eso que tú llamas amor

Capitulo I

No les ha pasado que llegan a cumplir cierta edad en la que te das cuenta que estas sola o más bien que no tienes un “Compañero de vida”, ni tienes perro que te ladre a como se dice popularmente; Y es en ese momento en el que la sociedad empieza hacer locas especulaciones como: (El tren te dejo); (Siempre creí que eras “rara”); (Camarón que se duerme se lo lleva la corriente). Pero la palabra más cruel de toda y que algunas personas les molestan escuchar pero a mí en lo personal después de 6 años me dejo de molestar es la palabra…..Solterona. Y para ser sincera así puedo pasar todo el día mencionando todo lo que una sociedad o familia habla sobre tu estilo de vida; Pero eso a mí nunca me importo o más bien no me importa. Nunca me he enamorado en mis 33 años de vida, si me han gustado algunas personas pero esto se termina como una fiebre, Y aunque no me lo crean si he tenido relaciones sexuales tampoco crean que soy “Asexual”.

Simplemente no me gusta estar atada a alguien al menos eso pensaba hasta hace dos meses cuando (El) llego a mi perfecta vida donde soy una excelente abogada y maestra en una de las mejores universidad de Holanda, pero para que no se sienta algo confundido y hagan preguntas como: ¿De qué rayos está hablando?, todo comenzó en un día donde el alcohol y la música se convierte en tu mejores aliados y donde tu mejor amiga se vuelve en tu hada madrina cosas que realmente no pasaron.

2 meses atrás.

— Bueno eso es todo muchacho para la próxima clase quiero un ensayo de 15 páginas acerca de la diferencia entre la explotación s****l y la prostitución, les recomiendo que traigan diapositivas porque se me puede ocurrir de que algunos de ustedes pasen a exponer su ensayo. - Sonrió de manera tranquila mientras escucho las quejas de mis estudiantes, guardo mi computadora y algunas cosas para irme del salón. — Pueden retirarse.

Después de dar por terminada la clase guardo mis código y algunos reglamentos del código penal en mi bolso, salgo del salón mientras siento mi cabeza punzar después de dar un tema bastante extenso acerca del abuso s****l, hoy estaba en esos días que todo me era un fastidio ( Hasta caminar y respirar) bajo las escaleras encontrándome con la sonrisa de Cheshire, y no precisamente trabajo con el gato de Alicia en el país de las maravillas solo es mi mejor amiga Vivian que me esperaba y al juzgar por su sonrisa pícara y el color rojo en sus labios ya sabía a qué venía y eso era.. Beber alcohol y ligar con cualquier chico en un bar.

— ¿Y bien Denisse?, lista para distraerte un rato y conocer algún bombón porque yo en lo personal estoy muy emocionada por lo que me espera esta noche.

— ¡No quiero! , hoy pasaran el maratón de los juegos del hambre y también quiero comer algo de pizza y morir lentamente en la comodidad de mi maravillosa y nada alegre casa. — Hable de manera cansada mientras pedía un taxi-

— ¡Nada de pero!, vamos a ir a un bar y punto. — me jalo del brazo mientras prácticamente me secuestraba en su vehículo y me llevaba a quien sabe dónde, esperando que no sea un bar de mala muerte.

……………

El bar estaba algo vacío tenía un buen ambiente, las mesas eran redonda con un color “Casi” café y con unos sillones rojizo que se miraba algo cómodo, la música era lenta y suave que provocaba sueño con solo tomar el primer trago de tu cerveza. Nos sentamos en una mesa al fondo para no llamar la atención aunque eso era meramente imposible si estaba con Vivian, ella pidió una botella de vodka (Solo para ella) mientras yo pedí una cerveza bien fría, en ese momento nos pusimos hablar acerca del nuevo profesor de la facultad de ingeniería y sobre el nuevo y misterioso decano de nuestra facultad que nadie conocía a excepción de la rectora de la universidad, y la verdad espera en Buda que no fuera un vejestorio.

— ¿Y bien?, con cualquier de todo estos papacitos vas a ligar esta noche, porque yo sinceramente ya le puse el ojo a unos de los chicos que está en la barra. — sonrió con picardía mientras bebía algo de su vaso.

— Vivian esos chicos están simpático, pero la verdad estoy muy cansada y me muero de sueño y además no podemos tomar mucho, mañana nos toca ir a trabajar y no quiero amanecer con una gran resaca.

Vivian chasqueo con la lengua, mientras se servía otro vaso de vodka.

— ¡Que aburrida eres!, la noche joven al igual que nosotras. — alce la ceja antes sus palabras mientras esta reía divertida. — ¡Ohh vamos! tampoco somos unas ancianas, el punto es que nos tenemos que divertir y que necesitamos carne fresca.

Bebió de un solo golpe el trago mientras apretaba los ojos como si hubiese chupado un limo, se levantó de la mesa mientras milagrosamente no tambaleaba como bambi cuando era recién nacido, se acercó a la barra mientras hablaba con los chicos simpáticos, estos reían como si se conocieran de años, después señalo la mesa donde nosotras estábamos y mágicamente los dos llegaron a sentarse a la mesa.

Sonreí nerviosa al ver a los dos chicos y como no estarlo si estaban Guapísimo, el más extrovertido era alto, pelo castaño y con un lunar debajo de su ojo izquierdo, mientras el otro era un poco más alto que su amigo. Pelo n***o, con un cuerpo esculpido por los mismos ángeles aunque este tenía cara de: “No me hables”

— ¿Y bien hermosas como se llaman? — Hablo el castaño mientras sonría de oreja a oreja.

— Bueno… Mi nombre es Vivian Escobar y ella es mi mejor amiga Denisse Power y ambas trabajamos de profesora en la facultad de Leyes en la universidad de Ámsterdam. — sonrió de manera amable mientras le cerraba a un hijo al castaño.

— ¿Tu apellido es Power? — sonrió con algo de burla el bello idiota.

— Si, ¿algún problema con eso? — hable de manera molesta mientras me cruzaba de brazos.

Este solo se encogió los hombros mientras seguía tomando su cerveza, después de que mi “Súper amiga” y nótese el sarcasmo dijera mi (Poweroso) Apellido el castaño llamado: Robert que me había caído súper bien y también su amigo el bello idiota de: Charles, seguimos hablando bueno los tres porque el otro solo se dedicaba a observarme cada movimiento que hacía.

Después de estar hablando nos fuimos a una improvisada pista a bailar una música de los 90, desgraciadamente me había tocado hablar con el señor “Simpatía” la música ya estaba en todo su apogeo mientras Charles tomo mi cintura de manera suave, lo observe incrédula mientras este me beso de manera lenta, abrí los ojos como platos por el repentino beso, lo aparte y lo mire entre molesta y cara de póker.

— ¿Pero que acabas de hacer?

Este se acercó de manera peligrosa mientras me miraba de manera socarrona, me cruce de brazos mientras escuchaba la música.

— ¿Acaso no es obvio? —alzo la ceja.

Lo mire de manera molesta, mientras este se iba donde su amigo que por cierto le estaba succionando el alma de Vivian, este le dijo algo en el oído y este solo sonrió y se fue del bar.

¡Vaya noche esta!