Gracias a Antonio, estamos bien, le debo mucho, él nos libró de vivir más pesadillas, y tormentas de las que nunca salíamos y hasta llegué a creer que no había salida, pero ahora tengo una esperanza hecha realidad, levanto mi cabeza y veo a Antonio acercándose a mi.
—Valeria, me reconforta mucho que estés bien, y no quiero que te espantes, pero me alegra que yo sea el que te salvó de más abusos. —Él sube su mano y la coloca sobre su mentón, mientras sonríe.
—Solamente tengo agradecimientos para tí Antonio, si no hubiese sido por ti no sé qué hubiera pasado con nosotros, mi bienestar no me importa mucho de todo, pero Martín el si me preocupa, no me parecería justo que él pagará por cosas de las cuales no tienes ni la mínima, cantidad de culpa, sabes Antonio Martín últimamente ha estado m
