—¿Kayden? —Celeste —dijo Kayden, sorprendido—. ¿Qué estás haciendo aquí? Ella se alejó de él porque ya sabía sobre el incidente de robo que ocurrió entre sus empresas. —Umm, solo por trabajo —dijo con cautela. Kayden notó el cambio en la forma en que lo estaba tratando y sabía la razón exacta detrás de eso. Entonces, puso un frente inocente y actuó como si no supiera nada. —¿Estás bien? —preguntó en un tono suave. Ella frunció los labios. —Sí. Será mejor que me vaya ahora —dijo e intentó irse. Sin embargo, Kayden se aferró a su muñeca. —¿Por qué siento que hice algo mal? —preguntó Kayden. Celeste se dio la vuelta y lo miró a los ojos. —No lo sé, Kayden. Tal vez deberías preguntarte eso —dijo inexpresiva. Kayden frunció el ceño. —¿Q-Qué quieres decir? No recuerdo haber hecho nada

