(21) Tal vez estaba actuando como una arpía, pero quería a mi hija de vuelta. El dolor que sentí al caminar a la oficina fue bastante grande, saber que tu esposo, "el amor de tu vida" se está viendo con la persona que más te odia en este mundo, hace que mi corazón se rompa. Y cuando por fin estuve enfrente de ese par de puertas de madera fina, que mostraban fortaleza y liderazgo, me dije a mi misma: "Ahora tengo que tener fortaleza y liderazgo como estás puertas" De par en par las abrí hasta dejar entrar el aire a la oficina. En el lugar ya estaba el abogado de Demian, mientras que al instante busqué a mi hija con mi mirada, pero ella no estaba allí. -¿Y mi hija?-Pregunté buscándola hasta por debajo de los sillones con la mirada. -Buenos días, señora Volkova.-Dijo el abogado calvo y

