SALVATORE KING
Llevo a Cloe a la oficina de Stefano. No suelta mi mano.
Una vez dentro tiro de su mano para acercarla a mí. No logro sacarme de la cabeza el miedo en su mirada. El temblor que producía su cuerpo, mandaba una y mil sensaciones a mi pecho. Que dijera que tenía miedo logro estrujar mi corazón. Sus rasguños aun los siento. Dije que me gustaría tenerlos, pero otra vez no de esta manera.
-¿ya te siente mejor?- paso la mano por su mejilla recorriendo su delicada piel. Me mira fijamente logrando que me pierda en esos ojos azul intenso. El rubor esta esparcido por sus mejillas, quiero pensar que es por mi cercanía.
Suspira.
-ya me siento mejor- moja su labio inferior mandado un choque eléctrico a mi sistema y entrepierna. Si la mafia rusa no me mata, esta mujer lo haré si n
