Por no confiar en ti.

¿Como sucedió?

Danna....

Cuando por fin las clases terminan camino para tomar el autobús, en 15 minutos pasara el último de la línea, poco a poco la Universidad se queda desierta como cada noche que espero aquí, normalmente como es lago tarde cuando concluyen las clases, todos son recogidos por sus padres, así que pocos toman autobús, ahora me toco un día de soledad, pues no hay una sola alma aquí, veo el móvil y se ha descargado, la batería le dura muy poco, así que ya es algo normal.

- Pero mira nada más que tenemos aquí...

Dice un hombre de algunos 30 y tantos pasando tras de mí.

- Hola, señorita, porque esta sola a estas horas, ¿Quieres que te acompañemos a algún sitio?

Me siento nerviosa, pero no lo demuestro, solo me quedo ahí observando como parece que ni un alma esta aquí cerca, parece como si todo se pusiera de a cuerdo para dejarme a solas con estos dos sujetos.

- A donde vas bonita, ¿No quieres acompañarnos a beber algo?

Me dice el hombre, esperando respuesta, pero solo me niego.

- Sigue tu camino, no estoy de humor.

Le digo como siempre lo hago con los indeseables.

- Vaya, no estas de humor, pues yo si, que te parece si te invitamos a nuestra casa y nos divertimos un rato preciosa..

Dice acercándose demasiado a mí.

- Aléjate de mí, te dije que no...

Pero él ambos hombres parecen molestos y uno de ellos me toma del brazo y me veo arrastrada hacia un callejón, intento gritar, pero uno cubre mi boca mientras el otro cuida que nadie se dé cuenta de lo que sucede, siento tanto miedo y pienso que estoy perdida, pues aun cuando intento luchar no puedo contra ellos, me tiran al suelo en el callejón y me veo luchando contra los hombres que intentan hacerme daño.

- Suéltala animal...

Escucho tras de uno de ellos, lo veo siendo arrojado contra la pared, mientras el que estaba encima de mí también es arrojado contra la pared, golpeando al otro sujeto.

- ¿Estás bien?

Escucho frente a mí, pero ahora mismo estoy tan atemorizada que no comprendo lo que sucede...

Me veo en brazos de Fernand, ¿Él? ¿Cómo supo que estaba aquí? Me lleva a su auto mientras los sujetos corren lejos de aquí.

¿Estás bien? ¿Te hicieron algo?

Me dice mientras con el móvil alerta a la policía y les da las señales de los sujetos que intentaron atacarme.

- Quería asesinarlos, malditos desgraciados, Danna, ¿Estás bien? ¿Dime algo por favor?

- Yo... Estoy bien..

Pero él no parece tranquilo, y me lleva a una clínica.

- Entramos y saluda a una mujer en la entrada.

Intentaron lastimarla, ¿Podrían revisar que todo esté bien?

La mujer pide una silla y me llevan dentro, intento decirles que estoy bien, pero Fer se niega y dice que todo estará bien.

Entro a una sala y la enfermera me revisa, ella me pregunta como me hice los moretones en los brazos, y entre lágrimas le explico lo que sucedió, ella comienza a llenar un documento, no sé que hago aquí, en realidad no me hicieron nada porque Fer llego, aún sigo preguntándome, ¿Cómo llego ahí?

- Bien, el médico vendrá a darte el alta, te pondrás esta pomada y tomaras esto si sientes dolor, fuera de eso todo esta bien, tranquila, ¿Eres amiga de Fer?

Veo que si lo conoce, supongo que quizá es su familia.

- Si, él es un amigo...

Ella sonríe y me dice.

- Fue una suerte que llegara a tiempo, pero estarás bien hermosa, tranquila.

El médico viene unos minutos después y parece que todo esta bien, Cuando el médico se va dejándome sola me quedo ahí pensativa, ¿Qué hubiese sucedido si él no hubiera llegado?

Escucho que alguien abre la puerta y veo que es él.

- Hola, ¿Estás bien?

Dice al caminar dentro.

- Sí... Es solo que...

Fernand camina hacia mí y me da un abrazo, cuando siento su cercanía, la paz que él me da al solo estar aquí consolándome, mis lágrimas comienzan a rodar, es como si bajara la guardia, como si todo lo que ha sucedido se apoderara de mí, mis lágrimas salen como un río, y él solo me abraza con fuerza.

- Todo estará bien, tranquila, te prometo que estarás bien..

Dice tranquilizándome.

Me separo un poco de él, lo observo, me doy cuenta de que parece tan preocupado, es increíble que este así, él es tan apuesto, tiene un rostro que parece tallado a la perfección por un escultor, sin poder evitarlo lo acaricio, y él se inclina hacia mí, siento como palpita mi corazón con fuerza mientras él poco a poco se acerca mi, por Dios, va a suceder, ¿Él va a besarme?

Y de pronto siento como sus labios acarician a los míos, besando con suavidad mis labios, le da un pequeño mordisco a mi labio superior y de pronto cierro los ojos y me dejo llevar por este lento, dulce y maravilloso beso, él lo hace tan despacio que es como si me desarmara poco a poco, siento como mi piel reacciona ante su cercanía, como mis bellos se erizan, una sensación que recorre todo mi cuerpo, sin poderlo evitar acaricio su pecho con mis manos, mientras él toma mi cintura.

Esto es como flotar, como estar en un maravilloso sueño, es increíble lo que un solo beso puede provocarte, mis piernas tiemblan, mis manos no pueden dejar de acariciar su cuello, entrelazo mis dedos con su cabello, mientras él aumenta la potencia del beso, siento como me quedo sin aire y me separo de él...

Ambos estamos tan agitados, intentando recuperar la respiración...

- No puedo, ya no puedo alejarme de ti...

Me dice con la respiración agitada...

Yo solo lo observo y le pido, casi como un ruego...

- Pues no lo hagas, no te separes de mí....

Él me observa y me abraza, escucho su corazón acelerado como poco a poco se va tranquilizando.

Él me observa y levanta la barbilla.

- Es hora de irnos..

Me dice observándome con una sonrisa..

Yo camino a su lado, me lleva de la mano y me siento como si fuese lo más importante para él, me siento tan importante, tan segura, jamás nadie me había hecho sentir así, jamás...