No se la razón de porque el mundo está en mi contra. Roy estaba rojo, odiaba que me pegaran, sobre todo papá, nunca lo hizo. Salimos de la casa sin decir palabra alguna. Mientras conducía al departamento, solo pensaba en las cartas. En el engaño hacia mi madre, que injusto, si ella le mintió pero nunca le fue infiel con otro hombre, algo imperdonable. ¿Que estoy diciendo? Ella mintió y él se siente adolorido, ambos cometieron algo imperdonable, como ahora yo lo estoy haciendo con Roy. Llegamos al estacionamiento del departamento, Abby se quedó dormida en el camino. Subimos al departamento y yo la lleve a su habitación, Roy estaba detrás de mí, me tomó de la mano y me guió a la sala.
— ¿Que paso? — Preguntó una vez que nos sentamos en el sofá.
— ¿De qué? — Pregunte acostando mi cabez
