Mia volvió de la cocina y los encontró en silencio —¿Qué pasa? —Cuestionó mirándolos a todos —Nada, aquí que los chicos no han pedido nada— respondió Cristal —¿Por qué? —Las estábamos esperando —respondió Taylor —Así es —apoyó Lan—. No queríamos pedir sin saber que les gustaría comer Mia se acercó a Cristal rápidamente —Pidamos pizza ¿no? —Si, yo digo que sí —Bueno, chicos pizza y algo de tomar, lo que ustedes quieran, igual en la cocina todavía hay una bolsa de dulces —¿Qué te dijeron? —Que no había problema, que nos cuidáramos y que era mejor que me quedara, ya que es peligroso andar sola de noche y que les avisara cualquiera cosa —Bien, por lo menos ya estoy más tranquila respecto a eso —Eres muy responsable Mia, pareces mi madre ja, ja —Cuando toca ja, ja Ellos inm

