POV CHARLOTTE
-Yo...no lo creo, haces feliz a papá, solo me sonríe a mi así- bese la punta de su nariz, pase mi dedito juguetón por ella.
-Es tu padre, te ama más que a nada, nadie puede arrebatarte eso- me regalo una sonrisa pequeña como si estuviera avergonzada.
Me llevo lentamente hacia el otro pasillo donde había demarcado sus habitaciones, abrió su puerta blanca dejándome un pequeño mundo rosa, osos de peluche gigantes, mesas de café perfectamente adornadas, juguetes ordenados en un estante por tamaños, era el paraíso para una niña, tenía toda clase de cosas que alguien desearía para su hija, pero no jugaba como debería, me invito a sentarme en uno de sus puff mientras ella se cambiaba.
- ¿Porque me has traído aquí Alessandra?-solté con voz tranquila, mirando los pequeños detalles
