La Reproduccion de la Humanidad

Felicia Describe 3:

Los malditos muertos vivientes se habían comido a mi esposo, el dolor y la furia que sentía me hicieron perder el control, destroce muchos de ellos con la camioneta y hasta me baje para acabarlos con el filo de mis grandes cuchillos militares recuerdos de mi amado. También recibí un poco de ayuda habían francotiradores arriba de la tienda mart que disparaban a las cabezas, entre más matábamos más aparecían atraídos por los sonidos de las armas, regresé al carro para dormir junto a mi hija estaba agotada. Era noche de sábado normalmente noche sexo ardiente y apasionado con Steve, era difícil cambiar el chip cuando tienes una vida s****l activa y después estar en cero. Cuando estaba en la casa aprovechaba a tocarme y masturbarme cuando me duchaba, pero ahora en el carro y junto a mi hija era imposible. Estuvimos ahí 3 días, hasta que vi que las compuertas de la entrada de la tienda mart se abrían a la mitad, salían varios hombres musculosos con carretas llenas de armas, salían disparando y cargando los rifles en sus camionetas, me despejé los ojos y me acomodé en mi asiento… encendí el carro para ir donde ellos. Mi hija comenzó a ponerse las mochilas y levanto los cuchillos del suelo.

Le grite a uno de los chicos guapos que quería entrar a la tienda, uno de ellos me sonrió y me grito…

—¡EXCELENTE LUCHA PRECIOSA! y le dijo a una morena armada que protegía la puerta junto a otras cuatro:

—¡Déjenlas entrar! el me tiro una pistola con su caja de municiones, me tiro un beso y se fueron. Entramos con nuestras cosas, pero dejamos la camioneta enfrente. Nos sentimos tan felices… las chicas nos abrazaron y nos dieron mucha agua. Les dije que buscaba mi esposo que su camión estaba afuera, pero nadie me supo decir algo, fui a visitar los diferentes grupos de familias, les mostraba la foto de Steve, pero nadie lo había visto. Mi hija lloraba al verme desesperada, así que decidí calmarme y comenzar a conseguir todo para nuestro dormitorio, colchón casa de acampar, freidora de aire, microondas, toda la comida y bebidas posibles. Me hice buena amiga de la morena se llamaba Lixy estaba junto a 2 de sus hermanas y una sobrina de 15 años, que hizo una bonita amistad con Sara.

A veces comíamos juntas con otras familias a veces solas, nos turnábamos para bañarnos teníamos cubetas y tinas que llenábamos con el agua de los lavabos, agua que también usábamos para tomar y cocinar. La bodega de tienda mart era inmensa y tuvimos mucha comida. La adrenalina que experimentábamos solo era 2 veces por semana cuando sacábamos la basura, también teníamos turnos para esto, salíamos 4 con armas y 2 cargando las bolsas... algunos grupos conseguían que sus familiares les respondieran llamadas y decidían irse. Cada día éramos menos también la comida se había reducido ya habían pasado tres años. Lixy dejo ir a una de sus hermanas… que se enamoró de uno de los chicos de una de las familias que se fueron y se llevó a su hija (La amiga de Sara). Yo por mi parte pasaba ejercitándome y estaba ocupada porque además de mi casa de acampar también tenía acondicionado los baños femeninos de la parte trasera como habitación de protección ‘’Un plan B’’ con ropa, colchones, cobertores, microondas, muchas sopas, comida enlatada, tinas completamente llenas de agua etc.