Al escuchar esa voz de reclamo me llevé el susto de mi vida, llevé una de mis manos al pecho para tratar de calmar mi corazón que quería salir corriendo del clase susto ¿Cómo es posible esto? —¿Qué mierdas hace Daniel aquí? —dije estando aún exaltada.
—Mientras ella reaccionaba a mí, yo me perdí por completo en su desnudo cuerpo el cual detallé sin pudor alguno, brillaba cómo luceros por lo mojado, y pequeños restos de espuma recorrían en este suavemente, cuando fui capaz de reaccionar a el trance que está me produce, recordé que estaba enojado con ella, ahora regresa mi pensamiento de que porqué ella está aquí, es obvio, me está persiguiendo, y Fabio la ayudó, así que la rabia regresó a mí, caminé hasta ella dejando ver mi furia, ella solo se quedó inmóvil, en el corto espacio que nos s
