—Jodida mierda— Murmuré. No podría salir de esta situación con la herida en mi brazo, y Alec parecía estar enfadado, puesto que, miraba todo el lugar en mi búsqueda.
— Estamos atrapadas, ¿verdad? — Susurro la chica asustada. No tuve de otra más que asentir. Sin mi padre, era imposible para mi tratar de escapar. Pero, haría caer un infierno sobre sus cabezas antes que traicionar a Cameron.
— Vete, antes de que te embarres con mi mierda— Hablé.
—¿Qué pasará contigo? — Me encogí de hombros.
— No me quiere muerta, así que no creo que me mate.
Luz se marchó siendo precavida. Mientras que yo me quede en el mismo lugar, pensando en la situación.
—Aquí estás— Dos hombres ingresaron tomándome bruscamente del cabello. Me trague un gemido de dolor cuando el hijo de puta presion
