—¡Vaya, vaya! ¡Bravo! Me han dejado por completo sorprendido, miren nada más, hijos míos, me traen a la cruz negra de vuelta a mi — Suelta el monstruo frente a nosotros haciendo ademanes con sus manos, sus acompañantes nos tienen rodeados sin darnos escapatoria, debemos encontrar un modo de salir con vida de esta, me abrazo a Adam, estoy aterrada, solo veo las caras de los fieros vampiros como clavan sus miradas en nosotros —No irá contigo, primero muerto antes que permitirte que le toques un pelo ¿Oíste, hijo de perra? — Suelta Adam mientras me abraza de forma protectora con un brazo apuñando su mano libre, los vampiros alrededor sueltan la carcajada junto a Vladius, en verdad el tipo es intimidante, su cuerpo ancho y fornido, largos cabellos atados en una coleta, nariz aguileña, una

