El camino a mi departamento fue silencioso pero para nada molesto, mientras me comunicaba con el decano dando aviso que continuaría en el hospital, Sergio solo me miraba y sonreía. Entramos a la habitación, Sergio comenzaba a acomodar las prendas que había traído, yo lo ayudaba con lo que me permitía hacerlo, ya que cuando quería tomar su bolso para acomodar sus pertenencias junto con los míos, brincaba de inmediato apartando de mi mano. Solo lo miro raro y no le doy importancia, me imagino que no desea ocasionarme problemas. - Ya que no quieres que te ayude.... mmmm entonces iré a preparar la cena. - Le digo y él asiente con la cabeza y una sonrisa. Sin mucho pensarlo voy a la cocina mientras busco que podría gustarle, picando algunas verduras con diligencia comienzo a cocinar. Mient

