Había pasado una semana exactamente desde que había ingresado al hospital y finalmente se había quedado unos días más para confirmar que todo estaba bien. Mila ya podía moverse, el collarín era de regla tenerlo durante tres semanas más tomando reposo.
Mila se había vuelto fría con John, solo contestaba “Sí” “No” “Tal vez” “No, gracias” “Por favor” John intentó tener toda la paciencia del mundo con ella, no quería meter la pata. Mila ya no había mencionado acerca de irse, así que John estaba por el momento tranquilo. Había decidido darle espacio, pero siempre y cuando tuviera a Andrew, su guardaespaldas personal.
Catherine no se había enterado de lo que le había pasado a su hija, pero lo que si sospechaba es que Mila se escuchaba extraña durante las llamadas, ahora era Mila quien contest
