Mary la noble meretriz

2194 Words
Por alguna razón extraña, Manolo se alejó de la Iglesia por un tiempo y por razones del destino, se encontró a los años con un primo llamado Santiago. Santiago era un joven de 19 años, alto, guapo, con un cuerpo esbelto, muchas mujeres caían rendidas a sus pies. Este joven era soberbio y arrogante y aparte le gustaba mucho beber y fumar. -Hola primo -Hola Santiago -¡Y ese milagro de verte a los años! -Ya pues, el destino parece que nos ha vuelto a unir después de casi 10 años sin vernos las caras. -Sí, fue hace tanto tiempo, recuerdo que íbamos a tu casa a jugar video juegos y a ver partidos de fútbol por la televisión. -Si lo recuerdo. -Bueno primo, mi visita es por la razón de que quiero que trabajes para mi padre y para mí. -¿Puedes hacerlo? -Primo, tengo que renunciar al trabajo donde estoy. -A parte está mi gran amiga Mayra y me daría mucha pena alejarme de ella. -Tranquilo primo, que te puedo presentar a alguna de mis amigas, las conoces y les coges. - Jaja jaja jajaja. -Yo soy fresco con las chicas primo, no me gusta tratarlas como meros objetos. -Primo, ¡ponte pilas!, agárrales de sus pompis y sus bustos y haces maravillas como yo les hago. Es delicioso hacer eso a las nenas. Todo esto Manolo le contó a Mayra, ella con los ojos tristes se dirigió a él con estas palabras: -¿Por qué te vas? -Si yo te quiero. -Mayra tengo que seguir adelante hacia nuevos rumbos y caminos y poder cumplir mis sueños. -¿Acaso yo no formo parte de tus sueños? -Amiga mía, tu llegaste a mi vida de la manera menos pensada, no formas parte de mis sueños. -Pero me fue grato conocerte y poder por primera vez sentir el afecto y la compañía de una bella colegiala como lo eres tú. -¡Vez que eres tan lindo!, tu forma de ser es lo que me cautivó de ti. Y así quieres que yo te deje ir. -Las almas que se aman de verdad se vuelven a reencontrar, sea en esta vida o en la otra. Llegó el momento de la despedida, Mayra abrazó a Manolo y mirándole a los ojos, le dio un beso desde lo más profundo del corazón a sus carnosos labios, este abrazo y beso parecían eternos, Manolo sintió por unos momentos todo el amor que le transmitía su querida amiga. Al momento de partir, Manolo regresó a ver a Mayra, recordando por momentos todo lo que esta niña adolescente le hizo sentir feliz, en esa vida tan solitaria que él llevaba. "ERES MI ÁNGEL DE PAZ, YO CONTIGO QUIERO ESTAR, TUS ALAS ME LLENAN EL ALMA", fueron las palabras que con muchas lágrimas pronunció Mayra por última vez. Agosto de 2.007, Manolo se encontraba en su nuevo trabajo junto con primo y su tío, se dirigieron hacia aquel lugar para empezar a realizar sus deberes laborables. El trabajo era sencillo, se trataba de supervisar a los trabajadores de varia construcciones de adoquinando, asfalto y bordillos. Manolo quedaba a cargo del personal para que cumplieran con todos sus trabajos de forma ordenada y sistemática. Santiago y su padre eran los dueños de la obra. Al salir de las tareas laborables, Santiago se dirigió donde Manolo para invitarle a donde una amiga suya. -Primo, acompáñame a ver a una amiga. -De seguro te va a gustar. -Vamos Santiago, te acompaño, pero tú debes saber que no soy muy sociable con las chicas. -No importa, vamos primo. Después de esta conversación, los dos se dirigieron a donde la mencionada chica, ella salió a verlos de su casa, impresionada no solo por la pinta de su amigo Santiago, vio a un joven que lo acompañaba, con un rostro angelical y una mirada que causaba ternura, ella se acercó a ellos. -Hola Santiago. -Hola Giselle. -Vengo con mi primo, te lo presento, se llama Manolo. -Hola Manolo, -Hola amiga de mi primo Santiago. ¿Cómo estás Manolo, es un gusto conocerte? -Igualmente, el gusto es mío igual. En ese instante Giselle llamó a Santiago por unos minutos para conversar a solas. -Santiago, él es tu primo. -Si lo es. -Discúlpame Santiago, ¡pero tu primo es más guapo que ti! Santiago en lo soberbio y arrogante que era, ya que ningún otro chico eran mejor que él, debido a que conquistaba a todas las mujeres que se ponían en su camino, se pronunció con gran envidia diciendo: -No creo que mi primo Manolo sea mejor que yo. -Si soy más alto, joven y fuerte que él. -Eso es cierto Santiago, pero ese rostro y esa mirada, él te supera. -Jaja jaja jaja, no lo creo. -Además Santiago, tu primo tiene algo que no entiendo, me provoca deseos sexuales, como que despierta en mí la lujuria. No sé qué es lo que tiene tu primo, pero quiero traerlo a mi casa para estar los dos solos y a ver qué sucede. -Vele tú si él quiere, ya que mi primo es antisocial con las chicas, en especial con chicas colegialas como tú. -¿Cuántos años tienes tu primo? -Él va a los 28 años. -¡No lo puedo creer, sí parece de unos 19 años! Tu primo me interesa más, se conserva tan bien y eso me gusta de los hombres. -Ve y dile si le puedes llevar a tu casa, porque yo tengo la seguridad que te va a dar la negativa.  -Jaja jaja jaja. Giselle habló con Manolo invitándole a su casa para ver unas películas, pero tal como dijo su primo, se negó rotundamente, aludiendo que tenía que regresar a su casa, antes de que se haga muy tarde. La joven de 16 años quedó sorprendida por el rechazo directo que él le dio. Si Giselle era una chica bonita, sexy y era virgen. ¿Quién podría rechazar semejante oportunidad? Todos se despidieron y cada uno se fueron a sus casas, Santiago a la de su padre, Manolo a donde sus hermanos y Giselle se quedó en su casa, dirigiéndose a su cuarto confundida por aquel rechazo, entró a su habitación y quedándose con ganas de tener sexo con Manolo y de entregarse por primera vez a un hombre, se quedó auto complaciéndose pensando en aquella mirada de inocencia y ese rostro que le provocaba solamente lujuria. Al pasar casi dos meses, Santiago junto con Manolo, otro primo llamado Francisco y un amigo de él, decidieron viajar a la playa a pasar unos días junto al mar, para observar el hermoso paisaje de la puesta del sol en los atardeceres, disfrutar de la buena comida y de ver a las chicas en bikinis. No faltaron las cervezas y la buena música, todos los cuatro disfrutaban de aquellos momentos y llegando a la playa, todos estaban un poco tomados y en un arranque de euforia, Santiago le propuso a Manolo a ir a una casa de citas para ver a mujeres con poca ropa y tomar unas cervezas con ellas. Manolo en su estado de ebriedad, dijo sin discutir nada, que aceptaba la invitación para ir a ver a aquellas chicas y poder conversar un rato. Los dos se dirigieron a una casa de citas a 20 minutos del mar, antes de entrar a aquel lugar, vieron a una chica muy simpática caminando al mismo lugar. Santiago y Manolo le preguntaron: -¿A dónde se dirige tan bella mujer? -Me dirijo a donde ustedes van a entrar. -O sea que trabajar tú aquí -Sí, chicos guapos, aquí trabajo. -¿Podemos entrar contigo? -Claro, será un gusto atenderlos. Los tres entraron a aquel lugar donde las chicas prestaban sus servicios por dinero y pidieron algunas cervezas y conversaban de muchas cosas, la chica era una de buenos modales, delicada, respetuosa y de un buen lenguaje en su habla. Santiago observando sus sexys piernas que eran blancas como la nieve, le preguntó: -¿Vamos al cuarto? -¿Cuánto me cobras? -Ella respondió. -No quiero ir contigo. -Que tu primo sea el que venga conmigo al cuarto. Santiago por segunda vez, vio como otra mujer prefería a Manolo antes que a él. La envidia y los celos eran tan notorios en él que no pudo disimular. Mary el nombre de la chica de aquel lugar, cogió de las manos a Manolo y le dirigió a su cuarto. -Vamos amor, quiero que tú me hagas el amor. -Eres muy distinto a los demás, nunca me miraste con ojos de lujuria o lascivia. -Además de que eres muy bonito, pareces con esa carita un angelito, me agradas mucho. -Tú también me agradas Mary, no entiendo como una mujer tan simpática y culta como tú, pueda estar en un lugar así. -Es una larga historia, que espero algún momento pueda contarte y entiendas la historia de mi vida y por qué sigo aquí. -Mientras tanto tómame y hazme tuya. Al momento en que ella se quitaba la ropa, Manolo observaba delicadamente como aquella mujer se desnudaba en frente de él. Sus bustos descubiertos, su Venus depilada y sus glúteos redondos y de una perfecta forma, se acercó a él y le empezó a besar. -Bésame Manolo, tómame, prueba mi cuerpo y deléitate en mis frutos paradisíacos. -Déjame sacarte la ropa. -Quiero verte desnudo y estés como yo. Mary sacó la ropa poco a poco de Manolo, hasta que llegó a su parte íntima, sacó su bóxer y observó un atributo s****l muy grande y que desbordaba gotas de mucho libido. -¡Manolo!, tienes tu manzana prohibida muy dotada, aparte de ser lindo de rostro, de esa miradita y de tu manera de ser, has sido bien agraciado con tu atributo s****l. -Me encantas, déjame pasar mi lengua por tu parte íntima y saborearla como el mejor dulce que he probado. Tras estos momentos de intimidad entre los dos, Manolo introdujo su m*****o a la Venus de Mary, los gemidos comenzaron a resonar poco a poco y más y más, mientras ella le pedía que no parare, que siguiera, que estaba llegando a su máximo éxtasis. Sus gemidos se escucharon hasta a fuera del cuarto, todos los presentes incluyendo Santiago, silbaron y Santiago no soportando y lleno de envidia escuchando los gemidos incontrolables, golpeó la puerta y apresuró a los dos a que terminasen lo que estaban haciendo. -¡Ya primo!, sal de ahí, que tenemos que irnos. -Vamos amor, tu primo está loco por qué yo te preferí a ti y no a él. -Vamos Mary, tienes razón, Santiago está actuando muy mal en contra mía. Al momento de salir del cuarto, Mary cogiendo una cadena de oro que colgaba de su cuello, se lo sacó y la puso en el cuello de Manolo y en presencia de todos los observadores incluyendo Santiago dijo: -Este recuerdo llévate de mí, en caso de que no te vuelva a ver. -Además te doy un beso con todo mi corazón, porque tú te lo mereces. -Gracias Mary, eres muy amable, eres una gran persona. Todos los hombres de aquel lugar, se murieron de admiración y a la vez de envidia, observando como un acto así de amor, se pudiera dar en lugares donde solo el hedonismo y la lujuria gobernaban. Saliendo del lugar, la mirada de Santiago era brutal, su furia no tenía límites. Manolo no pronunció nada, solo esperaba que la ira de su primo le pasase rápido y todo volviera a la normalidad. Dirigiéndose de nuevo a la playa, fueron a una cabaña a beber unos cócteles. El silencio era abrumador, ni una sola palabra se habló durante el tiempo que tomaron aquellos cócteles. Llegando la noche por fin Santiago habló: -Primo, ¿Qué le hiciste a esa mujer? -Ni bien te conoció, la enamorarte y no solo eso. -¿Qué le hiciste en el cuarto que sus gemidos se escuchaban hasta donde estaban las demás personas? -Pues primo, solo la traté bien, sin importar quién o que ella haga. -La traté como una mujer, eso es todo. No primo, tú tienes un secreto que me ido dando cuenta. ¡Tú enamoras a las más mujeres de una manera muy rápida!, algo nunca visto en mi vida ni en la vida de otros jóvenes o amigos míos, que son experimentados en enamorar a las mujeres para luego llevarlas a la cama. -Eso pasó con mi amiga Giselle y ahora con Mary, después, ¡con quienes más sucederá? Al cabo de unos días, Mary buscaba a Manolo llamándole continuamente, pero él no cedía a sus intenciones de que puedan quedar como enamorados. Mary estaba dispuesta aun a dejar su trabajo por irse a vivir con Manolo, a cambiar de vida por otro trabajo que sea digno de ella. Mas él no acepto, solo le dijo que quedaran como amigos y que la experiencia que tuvieron ese día, lo guardara en su corazón como un lindo recuerdo que vivieron los dos. Mary se entristeció mucho y tardó un buen tiempo en recuperarse de aquel sentimiento profundo que tuvo por Manolo.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD