La furia de Jezabel y el poder de Manolo

2271 Words
En una noche a vísperas del verano del año 2007, la maligna súcubo se dirigió a los aposentos de Manolo, con una furia infernal se mostró físicamente a las 3 de la madrugada, con sus cabellos rojos, su mirada de terror pero con un rostro hermoso y un cuerpo desnudo esbelto que estaba cubierto con un vestido n***o gótico, llegó la gran Jezabel. -Manolo, despierta, soy Jezabel y he venido para destruirte, ya que no correspondes a mi oscuro amor. Manolo perplejo viendo a tan esbelta pero siniestra mujer, pronunció estas palabras: -¿Tú eres entonces ese ser maligno que hace tiempo atrás poseyó a aquella mujer que fue a mi local a lanzarme algún tipo de maldición? -Si esa fui yo, te he seguido desde las sombras para acercarte a mí, pero tú infamemente te has enamorado de una mortal, que no es nada, que su mente solo está en las cosas mundanas y terrenales y además su cuerpo al pasar el tiempo se envejecerá, morirá y se descompondrá. -En cambio yo, no vivo en el tiempo y soy atemporal, además soy muy hermosa, poderosa y tengo muchos súbditos en mis dominios que con una sola palabra están a órdenes mías. -¡Y osas a rechazarme!, soy casi como una diosa, ¡eres un desgraciado! Sin dejarle hablar ni una sola palabra a Manolo, Jezabel lanzó unos rayos eléctricos sobre su mortal cuerpo y lo arrojó lejos del cuarto, quedando inconsciente, ella pensó que lo había matado de un solo golpe y huyó. A lo lejos, Jezabel tenía lágrimas en sus ojos, no entendía lo que le sucedía, quizá por primera vez un su inmortal vida, sintió como es perder a un ser querido y más aún que lo había asesinado. -¡lo he matado! ¡lo he matado! - Yo te amaba, ¿Por qué no me amaste? -Yo siendo maligna y malvada, nunca te hubiera hecho daño. -Te fuiste, una vez más, ¿Ahora donde estará tu alma? -Lo único que me queda es refugiarme en mi oscuridad, haciendo lamento de tu pérdida eterna. Los profundos lamentos de la Princesa de los súcubos se escucharon por todos los rincones de sus dominios, sus súbditos impotentes al verle en tal situación a su Señora, no pudieron hacer absolutamente nada. Fue un dolor tan grande que no salió de su palacio por mucho...mucho tiempo. Mientras tanto en la Tierra, Manolo de manera milagrosa se despertaba y reaccionando de todo lo sucedido, sintió que una fuerza interior comenzó a revelarse, un poder desconocido, todas sus heridas por el golpe casi mortal de Jezabel se restauraron, sus tejidos de la piel y sus células comenzaron a regenerarse. Era algo impresionante lo que estaba pasando y una Luz en su interior empezó a expandirse por todos lados. Demonios y espíritus malignos horrorizados con esa gran Luz, se escondieron atormentados en sus guaridas o fueron a otras dimensiones, nadie podía entender lo que estaba pasando. Los rumores de este acontecimiento llegaron a oídos de Dissoar, de Drácula, de Jezabel y del mismísimo "Príncipe de las Tinieblas, Lucifer. Todos los territorios del inframundo supieron de la noticia. Dissoar desde su palacio pronunció estas palabras: -Queridos míos, vayan a averiguar de dónde proviene tal poder luminoso, ya que hace mucho tiempo no hemos visto un fenómeno así que cause estragos en el mundo de las tinieblas. -Si su leal Majestad, iremos al epicentro de este fenómeno. -¡Vayan! y tráiganme la noticia a la brevedad posible. En cuanto a Jezabel, no decidió ir al lugar de lo sucedido, aún seguía con el dolor en su oscuro corazón al a ver pensado que su amado Manolo estaba muerto, pero sin embargo estaba asustada por ese poder que se desplegó sobre todos los lugares. Drácula con espanto y a la vez admiración, ya que esa vibración tan poderosa solo una vez en su vida la había sentido, esto fue al momento cuando Drácula estaba muy solo en su castillo de los Cárpatos, en la antigua ciudad de Transilvania, donde a lo lejos sintió una vibración tan fuerte que su congelado corazón empezó a derretirse, era Elizabeth que de manera desesperada buscaba medicinas para sanar a unos aldeanos muy queridos por ella .Muchos de ellos estaban muy enfermos. Ella llegó en una noche a ese castillo oscuro, tétrico y tenebroso, en medio de las más espesas tinieblas, caminando por las espesuras del denso bosque, con el aullido de los lobos y con la luna llena brillando en todo su esplendor. Golpeando la inmensa puerta con forma de león, se abrió de manera automática, ella comenzó a hablar diciendo: -Buenas noches. -Necesito ayuda. ¿Alguien vive aquí? Después de unos minutos de silencio, la presencia terrorífica pero a la vez magnificante de un ser envuelto con ropajes negros le dio la bienvenida. -Ce vă aduce aici o creatură atât de frumoasă și nevinovată? (¿Que os trae por aquí a tan hermosa e  inocente criatura?) Ella con un rostro como de los ángeles del Cielo, blanca como la nieve, con su cabello n***o largo hasta casi la cintura, sus ojos negros que irradiaban una pureza absoluta, sus labios rojos como el carmesí y su vestido rojo que detrás de aquellas prendas se veía la forma de un escultural y perfecto cuerpo, contestó al ser: -Buenas noches distinguido señor. -Respondió la Luz de las luces. -He venido a pedir ayuda, ya que se rumorea en las aldeas alrededor de Transilvania que hay un castillo, lejos de los pueblos, allá cerca de los Cárpatos donde existe un hombre misterioso y solitario que tiene muchos conocimientos en medicina, y quería saber qué tan cierto es. Vlad el vampiro, puso la mirada fija en los ojos de aquella hermosa doncella. -¡Tú no me tiene miedo! -Por qué he de temer, si mi necesidad de ayudar a la gente es más grande que cualquier temor o miedo que pueda enfrentar. -Aparte de hermosa, eres muy pura de corazón y siento una vibración demasiado poderosa de Luz en tu interior. -¿Qué eres o quién eres? -Soy Elizabeth, perteneciente a la nobleza de la ciudad de Transilvania. -¿Y ese vestido rojo que traes puesto que significa para ti? -AMOR, yo soy el AMOR. Todos esos recuerdos de hace tanto tiempo atrás le trajeron a la memoria, debido a esta vibración tan parecida que sintió al estallar aquella Luz. La curiosidad de Drácula fue tal que él mismo en persona junto con algunas súcubos y un licántropo fueron al lugar de origen. Por otro lado, Lucifer desde su trono infernal en "Infernicia", en presencia de todos sus ángeles caídos, demonios de los más malvados, algunos no muertos y licántropos, un sin número de pequeños leprechaun y de hadas que cayeron en el lado oscuro y un vasto grupo de legiones de espíritus infernales, habló de la siguiente manera: -He recibido noticias de que un poder de Luz tan raramente visto en mis dominios que es la Tierra entera y algunos otros mundos más en toda la Galaxia, ha turbado a muchos de mis demonios y están escondidos en sus guaridas y han huido a otras dimensiones. -Quiero saber: ¿Quién o que provocó esto? -Que desde los tiempos en que vivió un fastidioso anciano allá por Pietrelcina al sur de Italia, hace unos 100 años atrás, me causó serios problemas en mi Reinado aquí en la Tierra, fueron años los que tuve que batallar y y enviar a una serie de mis demonios mas espantosos para que lo destruyan, pero no lo lograron. -Mas tuve que esperar que este ser fallezca y vuelva a los Reinos de la Luz de dónde provino. -Donde por algún tiempo, hace miles de años atrás, YO lo gobernaba todo, como la mano derecha de Aquel a quién me traicionó y me arrojó lejos de Sus Reinos. -Desde que este monje capuchino no está más en la Tierra, el mundo entero volvió a su normalidad. -Lujuria, maldad, oscuridad, tinieblas, muerte, odio, ira, depresión, asesinatos, opresión, corrupción, violaciones, peleas, guerras, genocidios, enfermedades, corrupción y tantas cosas más, que son de común en mis bastos reinos, sin que nadie me estorbe o se oponga a mí. -Pero ahora me han dado noticias que una Luz así de poderosa, incluso más que aquel anciano capuchino poseía, ha resurgido. Y es mi deber como Amo y Señor del mundo impedir que la luz aun por más pequeña que esta sea, hay que extinguirla. -He esperado tantos siglos para gobernarlo todo y no exista oposición alguna. Y si puedo, subiré a los Reinos de la Luz a entronizarme como el dios que lo regirá todo.  -Jaja jaja jaja jaja jaja. -Voy a enviar a esta misión a uno de los demonios más siniestros del inframundo. Desde las más espesas y lúgubres sombras, se hizo manifiesto un ser de absoluta maldad, el gran Sumo Sacerdote de los mundos oscuros apareció, su presencia provocaba terror aun hasta a los mismos demonios, con sus ropas sacerdotales, vestido de n***o, sus herramientas de tortura colgadas en su cintura y su rostro lleno de clavos se hizo presente. Su nombre, "Pinhead". -Pinhead, exclamó Luzbel. -¿Qué deseas que haga Lucifer? -¿Para qué me has invocado? -Ve tú, junto con otros cenobitas a averiguar que es esa Luz que nos ha puesto en alerta a todos nosotros. -Denme toda la información del caso y nos reuniremos para ver qué medidas adoptamos. -Iré Lucifer. -Lo averiguaremos todo. Tras esta conversación entre estos poderes de las tinieblas, Pinhead desapareció, llevando consigo a dos cenobitas más. Dirigiéndose al mundo de los vivos, desde el plano astral, fueron al lugar del epicentro. Era una pequeña casa al sur de una ciudad poco conocida en América del Sur, desde lejos observaron a un joven mortal, que desprendía una Luz que estos demonios tuvieron recelo de acercarse, ya que esa luz podría calcinar sus espíritus. El Sumo sacerdote del inframundo habló con su voz metálica y gruesa pronunciando: -The power that this boy gives off is impressive, we must be very cautious and see how we get a little closer (Es impresionante el poder que desprende este muchacho, debemos ser muy cautelosos y ver la manera como acercamos un poco más). -Sí, Sumo sacerdote. -Debemos ser cautelosos. Al pasar algunos días, Manolo se sentía como nuevo, esta fuerza que desprendía desde su corazón, le daba las más altas vibraciones, sentirse en paz, alegre, feliz, tranquilo y con un gran estado de calidez en su interior. Era un domingo, cuando antes de salir de su trabajo, Edgar su amigo, junto con Andrés su hermano y la grata sorpresa de la visita de su madre que venía de E.E.U.U., visitaron a Manolo. Mientras conversaban todos ellos, uno de los cenobitas tomando forma humana, cambiándose del plano astral al plano físico, se acercó a donde todos estaban reunidos platicando. -Señores buenas tardes. -Buenas tardes anciano, respondió Edgar. -¿Pueden dar un poco de dinero a este pobre anciano que tiene hambre? -Está bien dijo Edgar. -Al momento, Manolo le dijo a Edgar. -Deja Edgar, yo le voy a dar algo de dinero a este señor. Manolo se dirigió hacia el anciano para darle unas monedas que cogió de la caja chica. -Tome señor este poco de dinero que tengo, vaya y coma algo. Al momento en que el cenobita en forma de anciano extendió sus manos y tocó las de Manolo. Cayó de rodillas al suelo diciendo: -Es usted muy poderoso, que me ha hecho caer de rodillas ante usted, es mejor que me vaya. El anciano desapareció de manera repentina delante de todos los presentes. -Edgar se pronunció enseguida con estas palabras de asombro. -¿QUE LE HICISTE A ESE ANCIANO? -¡QUE SE POSTRÓ ANTE TI COMO QUE FUERAS UN DIOS! -Yo no le hice nada, solo le di unas monedas que saqué de caja chica. -Eso es todo. Momentos después, el cenobita volvió a su estado original e informó todo a Pinhead. -El poder que tiene ese joven, hizo que caiga rendido a sus pies sin explicación alguna, es un terror para nosotros lo que él posee dentro de sí. Los cenobitas decidieron ir lo más pronto posible a "Infernicia", al palacio real de Luzbel en el centro del infierno. -Pinhead fue directamente hacia Lucifer comentándole la noticia. -Lucifer, hemos ido a ver al joven. -¿Es un joven? -Sí, tiene aproximadamente unos 19 años de edad (aunque a la verdad Manolo tenía 27 años, pero sus genes de vampiro lo conservaban en un muy buen estado en su apariencia física). -¡No pensé que una criatura tan prematura tuviera semejante potencial! -Es algo no visto por milenios, he batallado con poderosos mortales que han venido desde los Reinos de la Luz naciendo de una mujer y han sido de edades maduras. Pero en este caso no. -Me interesa mucho seguir los pasos de esa criatura. -Sería grandioso volverlo al lado oscuro y todo ese poder que tiene, utilizarlo para muchas cosas, en especial para consolidar mi reinado en la Galaxia entera y destronar al que una vez le llamé, "Padre". -No lo pierdas de vista, con todo, detrás de ti, enviaré a más de mis poderosos demonios del infierno para bien seducirlo al mal y en caso que se llegara a resistir, no me quedaría más opción que destruirlo. -No quiero tener más problemas con seres venidos de los Reinos Superiores, deseo seguir reinando en mis dominios eternamente, porque yo soy el Señor de todo.  -Jajaja jajaja jajaja.    
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