La perseverancia de Susana
2148 Words
Agosto de 2.008, Manolo tenía el alma contristada, no entendía del dolor y sufrimiento extraño que sentía en su interior.
-¿Qué me pasa?
-¿Por qué siento dolor y tristeza en mi alma?
-Si recién pasé días esplendidos cuando me fui de retiro a las montañas.
-Necesito meditar y reflexionar mucho para saber discernir por qué siento esta pena tan grande.
Tras algunos días de meditación, Manolo llegó a la conclusión de que algo malo le estaba pasando a aquella niña de la Iglesia, era una intuición que él la tenía y estaba seguro de así era.
-Eres tu pequeña niña, que me trasmites tu tristeza, de seguro algo malo te está sucediendo, pero necesito averiguar que es.
Paralelamente a lo que Manolo estaba pensando, Susana se encontraba en su fiesta de 15 años, el afortunado caballero, un chico muy alto y delgado con ciertos rasgos de simpatía, llevó de la mano a aquella esplendorosa quinceañera a presidir de la gala.
Todos eran felices; sus padres, sus hermanos, sus amigas, los invitados y el caballero de honor, pero Susana no, ella mostraba su sonrisa superficialmente, pero su corazón estaba triste, muy triste, ya que su Eterno no se encontraba allí para que la lleve entre sus brazos, algo que ella también empezaba a desear, pero esta vez en el altar, ante la presencia de su Dios para que los una para siempre.
Septiembre de 2.008, Manolo después de venir de su retiro en las montañas, se cambió de trabajo. Una hermana de una conocida de él, le llamó para que le reemplace en su puesto de trabajo. Era en una universidad de renombre de la ciudad.
El trabajo de Manolo era en una Biblioteca, donde se encargaba de prestar a los alumnos universitarios libros, revistas y videos para sus respectivos estudios.
En sus primeros días de trabajo, él se acostumbró fácilmente, era un ambiente muy hogareño, su jefe, sus compañeras de trabajo, todos ellos eran muy buenas personas, estimaban mucho a Manolo.
Una de sus compañeras de trabajo, Daniela, una chica mulata, muy simpática de cabellos largos rizados y una sonrisa muy bonita, puso sus ojos en él.
-¡Que chico tan bonito!
-De seguro muchas de las chicas de la universidad querrán conocerlo y hacerse amigos para luego estar con él, creo que para mí será muy difícil que ponga su mirada sobre mí.
-Pero no perderé nada en el intento, como lo voy a tener cerca mío, voy a intentar persuadiéndole para que se pueda fijar en mí.
Pasaron los días y en verdad muchas de las chicas de algunas de las facultades de la universidad, pusieron los ojos sobre Manolo, las indirectas y los coqueteos de las chicas ponían en compromisos a Manolo.
Mientras Daniela observaba desde lejos como su anhelado chico era seducido y encantado por las hermosas chicas que lo rodeaban, mientras él les ayudaba a entregar los libros para sus estudios.
Era una tarde cuando Daniela se acercó a Manolo para conversar unos momentos.
-¿Manolo, si estás bien aquí en tu trabajo?
-La verdad Daniela, me gusta mucho trabajar aquí, aunque sea temporalmente.
-Me alegra mucho que te sientas bien con nosotros.
-Sí, ustedes me han tratado muy bien y les agradezco mucho por eso.
-Tú te lo has ganado Manolo, la forma de portarte con las chicas de la universidad, tu atención a cada una de ellas, tu ayuda y tu forma de ser las tienes locas.
-Pues yo solo cumplo con mi trabajo y trato de ser lo más amable y servicial con los chicos y chicas de la Universidad.
-Eso sí, pero tu manera es especial, además que eres muy bonito y esa mirada de inocencia que tienes, sacas un suspiro a más de una.
-Jaja jaja jaja. (Se rió Manolo)
-Manolo, tu enamorada debe ser bien afortunada en tenerte, además ella debe ser muy hermosa y con un gran corazón para que la tengas a tu lado.
-Daniela, yo no tengo enamorada, no se lo que es tener una novia.
-¡Pero es imposible!, ¡un ser así como tú que no tenga novia!, no lo creo, nadie lo va a creer.
-Pues no la tengo, en verdad te lo digo.
-Debe ser que debido a tantas mujeres que han estado tras tuyo, no sabes con quien mismo quedarte y haz decidido estar solo.
-Ni tanto Daniela, yo más me enfoco en mis estudios, mi trabajo, estar con mi familia y cuidar de ellos, escuchar música, leer mucho, juego video juegos y a veces jugar billar con mis amigos con unas cervezas.
-Algún rato mi amigo Manolo te llegará una chica que la ames de verdad.
-No lo sé amiga, no lo sé.
Todas las mañanas que Manolo estaba en su casa, ya que su trabajo era en los horarios de la tarde, venía nuevamente a sus pensamientos aquella niña de la Iglesia. No la podía olvidar, en su mente solo estaba la imagen de ella y aquella jovial sonrisa.
Todo esto era debido a que Susana constantemente oraba a su Dios por la vida y la salud de Manolo, además ella pedía que nuevamente regresara a la Iglesia, pero que esta vez no se alejara más de ahí.
-¡Padre mío!, nuevamente vuelvo a buscarte para pedirte por Manolo, cuídalo mucho y que muchos de tus ángeles lo cuiden.
-Que también le hagas regresar a la Iglesia, pero que esta vez no se vaya más.
-Me hace mucho daño que él venga por un tiempo y luego se vaya.
-No quiero que otra mujer la enamore y se case con él, porque en verdad me destrozaría el corazón.
-Tú sabes mi Dios que mis intenciones son puras y es mi primer amor, creo que me enamorado perdidamente de él sin haberle aún conocido.
-Pero así es el Amor y no puedo mandar a lo que mi corazón siente.
-Yo ya no soy una nenita de 13 años o 14 años como él me vio antes, tengo 15 años y me he dado cuenta que mi cuerpo ha desarrollado y soy bastante alta, de seguro lo podré atraer por mi cara bonita y el cuerpo de mujer que ya lo tengo y de seguro se fijará en mí.
Yo no sé
Por qué me siento hoy tan diferente
Por qué no quiero nada con la gente
¿Qué será? Yo no sé.
Por qué mi cuerpo cambia día con día
Y siento que yo ya no soy la misma
¿Qué será? ¿Qué será?
Ahora despierta la mujer que en mí dormía.
Y poco a poco se muere la niña
Empieza la aventura de la vida ahora
Me enciende como un sol la primavera
Mis sueños se convierten en promesas
Me cambia el corazón de quinceañera.
Yo no sé
Por qué mi cuerpo cambia día con día
Y siento que yo ya no soy la misma
¿Qué será? ¿Qué será? Ahora
Despierta la…
Quinceañera, grupo Timbiriche (1987)
-Espero lo traigas de regreso.
-Te quiero mucho.
-Tu pequeña hija, Tuti.
Dios seguía enviando fuertes inspiraciones e incluso señales a Manolo para que regresara a la Iglesia, conozca a Susana, se hicieran amigos y luego se enamoren y finalmente se casen.
-¿Qué me pasa niña, que hasta en sueños te veo?
-¿Qué me estás haciendo?
-Te pienso, te sueño y ahora te he comenzado a extrañar.
-Me estoy volviendo loco.
-Dios, tú que me has acercado más a ti y que sé que me has ayudado mucho en tantas cosas.
¿Qué tiene esa niña de especial?
¿Por qué no la dejo de pensar que hasta en sueños se me aparece?
-Será mejor que me empeñe en pensar en otras cosas y siga con mis actividades cotidianas del día.
Pero en esa misma noche, después de que Manolo regresara a su casa, llegó, saludó a su familia, luego merendó y finalmente se durmió.
Y a la madrugada del siguiente día antes de despertarse, él tuvo un nuevo sueño donde veía a Susana con una vestimenta azul marina y en su espalda una estrella blanca, que significaba que era ella un ángel que encarnó una vez mas en forma humana a causa de su amado y eterno Manolo.
La estrella es símbolo de los ángeles del Cielo y Susana lo llevaba en su espalda.
Sin embargo Manolo al despertar hacía caso omiso a las señales y sueños que la Divinidad le estaba manifestando.
Pasando por alto todo esto, llegó un día que en su trabajo conoció a algunas chicas por medio del Internet, publicando sus fotos de adolescente y de su juventud, no tardó en atraer a chicas de muchas partes del país para que le envíen todo tipo de mensajes, desde hermosas frases hasta propuestas indecentes.
Además, como esta página de r************* era para hombres, mujeres y homosexuales, hubo gays que querían conocerlo, hacer todo tipo de fantasías con él, pero jamás tuvo ni ha tenido inclinación alguna por personas del mismo sexo. Así que todas las preposiciones homosexuales de estos hombres, no tenían efecto alguno en él.
En una de esas tantas tardes donde Manolo se relajaba en su trabajo, cuando no había muchos estudiantes en la biblioteca, conoció a tres chicas por Internet, la una vivía por el oriente, la otra era de la parte de la costa y la última era de la misma ciudad.
La chica que vivía en el oriente se llamaba Erika, los dos conversaban de muchas cosas, ella quería conocerle a él en persona pero nunca se logró tal encuentro.
La otra chica que vivía en la costa, Jessica su nombre, una costeña trigueña-blanca, de un cuerpazo increíble y un rostro que a cualquier hombre despertaba la lujuria, en especial esos labios gruesos y de linda forma, todo lo que podías imaginar con sus labios te hacía que fantasees hasta lo inconcebible.
Por último Cristina Zurita, una costeña pero que vivía en la ciudad, blanca, una cara hermosa y con su vestimenta fashion, era realmente una mujer muy codiciada, además que trabajaba en una televisora en la supervisión de un programa, muchos hombres la pretendían.
Las tres estaban muy interesadas en Manolo, pese a que solo le conocían por r************* .
Sin embargo llegó un día que Manolo decidió conocer en persona a Cristina.
-¿Cómo estás Cristina?
-Hola Manolo que es de tu vida.
-Bien, aquí conversando un rato contigo para ver si salimos un rato.
-Está bien Manolo.
-¿Me pasas viendo en tu carro dijo ella?
-Amiga yo la verdad no tengo carro y no soy de dinero, te soy honesto.
-Si quieres salir bueno, o sino no ha pasado nada.
-Está bien Manolo, veámonos por el Hotel "Quit" el sábado en la tarde.
-Yo te paso viendo en mi carro.
-¿Seguro Cristina?
-Sí, sé que soy aniñada, pero tú me caes bien y has sido sincero conmigo.
El encuentro se dio, los dos salieron como quedaron pactado. Ella fue en su carro rojo Volkswagen golf.
Manolo esperaba cerca del lugar de encuentro, hasta que ella asomó y por lejos dentro de su vehículo, Cristina le hizo señas para que se acercara y pueda entrar al auto.
-Manolo, en verdad si eres como en las fotos.
-Discúlpame que sea tan directa, pero hay un montón de chicos y hombres que ponen unas fotos que se les ve bien atractivos y luego cuando están en directo son bien distintos.
-En tu caso no es así, me agradas que seas así de sincero conmigo.
-Sí, Cristina, soy el de las fotos de las r************* y bueno tú has sido bastante simpática, de seguro hay un montón de chicos haciendo fila por estar contigo.
-Pues la verdad sí, pero muchos de ellos solo buscan llevarme a la cama, pasar el rato y luego se van.
-Eso no me gusta para nada de los hombres, son unos promiscuos, solo piensan en tener sexo y nada más.
-Yo veo que tú no eres así, ¿porque crees que te he permitido acercarte a mí?
-Sí, te entiendo amiga, tienes toda la razón del mundo a cerca de la gran mayoría de los jóvenes y hombres adultos.
-Manolo, si hasta los viejos son morbosos y sucios, ni ellos se escapan, esta sociedad del siglo XXI está bien corrompida.
Luego de conocerse, tanto Manolo como Cristina procedieron ir a un casino a divertirse un rato. Jugaron por largas horas, los dos se sentían muy bien, Manolo sentía una vez más el cariño y el amor que las mujeres mostraban por él.
Se tomaron unos tragos y ella le daba de beber del mismo sorbete demostrando la atracción s****l y física que ella tenía sobre él.
Ya fue el momento de la despedida, Cristina se sintió muy a gusto con Manolo y al igual él.
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