Taylor mi Protector

Te encontré

-Cada día era lo mismo, una rutina que se repetía, ducha, vestirme, tomar el auto y llegar a la agencia-

-Hace una semana que comencé con el tráfico de mujeres en ese bar, descubrí que era una organización muy grande-

-Los datos que sustraje de la mujer de esa noche me ayudo a llegar al centro de operación, fue una misión fácil para mi-

-Revisaba otros expedientes cuando escuché las noticias, la familia Holly había sido brutal mente asesinada, se supone que Bernal estaba en ese caso-

-La imagen de una joven era publicada, al parecer era la única sobreviviente, o al menos así lo creían-

-¡Taylor!- escuché mi nombre-

-El gran jefe me llamaba, él era casi como un fantasma, solo pocas personas lo habíamos visto-

-Me hizo ir a su oficina, lo veía caminar de un lado a otro, en su mano tenía fotos de los Holly.-

-Tu debías realizar esta misioné pero veo que fallaste- mencionó

-¿Que?-

-Se te envío con la notificación que era VIP solo tú podrías hacerlo, ¿por que designaste a Bernal?-

-Yo no asigne, él quiso tomar el caso-

-¡Era tuyo!- el hombre comenzó a lanzar todas las cosas que tenía en su escritorio-

-¿Y Bernal?-

-El muy maldito se involucró con los responsables-

-Eso no puede ser posible-

-Lo es, ahora es tu deber encontrar a Samantha Holly-

-Señor-

-No te lo estoy pidiendo, estoy dándote una orden-

-¿Está viva?-

-Por tu bien ese pero que así sea, quiero que la busques y me la traigas, ella es lo único que me queda-

-¿Que?-

-Ella es mi sobrina así que la necesito con vida-

-Salí de su oficina, tuve que correr a buscar el expediente que había guardado en mi cajón.-

-Comencé a revisar hoja por hoja, quería encontrar una pista que me llevara a la joven-

-Tome mis cosas y marche hacia la casa de los Holly, todo debe iniciar desde ahí-

-Al llegar todo era un caos, realmente esto estaba muy mal-

-Soy el Agente Taylor, quiero un reporte-

-Agente Taylor, cinco camionetas negras llegaron en la madrugada, dispararon sin mediar palabras, el señor y la señora Holly trataron de esconderse junto a sus hijos pero una fuerte explosión se escuchó-

-El señor quedó vivo, lo tomaron como rehen, le estaban pidiendo algunas claves, no sabemos que es-

-El no quiso darlas, tomó un arma y se disparó-

-¿Quien presenció esto?-

-Uno de los guardias de seguridad-

-¿Donde está?-

-Lamentablemente muerto, no resistió las heridas que tenía-

-¿Y el agente Bernal?-

-No sabemos nada de él-

-Comencé a llamar a Bernal, pero me enviaba a buzón-

-¿Que sabemos de la hija?-

-Todos murieron señor-

-¿La hija también?-

-Aquí están los cuerpos, por favor sígame-

-llegamos a la sala principal, pude contar 6 cuerpos, revisaba uno a uno, pero ninguno era similar a la foto de la hija-

-Falta un integrante-

-Eran todos los que estaban en la casa, Agente Taylor-

-Decidí revisar el lugar, poco a poco iba por todas las habitaciones, al final del pasillo había una que me llamó la atención, al abrirla pude ver que tenía toques femeninos-

-Iba revisando el lugar, tome una fotografía, había una niña rubia de ojos azules sentada en las piernas del señor Holly-

-Había un letrero sobre su cama, era su nombre abreviado. Samy, así que este es la habitación de Samantha Holly-

-Tome lo que parecía su diario, leí algunas hojas buscando información, habían anotaciones sobre amistades y su familia, días típicos de una jovencita-

-Me sorprendió encontrar una dirección, estaba escrita de Afán, la apunte en mi agenda y salí-

-Al menos ya se por donde comenzar-

-Salí de casa de los Holly, dos pensamientos me daban vueltas, uno ¿por que está viva Samantha? Y dos ¿donde carajos está Bernal?-

-Tome mi auto, coloque la dirección en mi gps, me indicaba que era el centro de la ciudad-

-Al llegar al lugar revisaba todo, la verdad era muy peligroso para una chica, la dirección era una bodega, que según yo estaba abandonada-

-Me acerqué a la puerta, utilicé mis conocimientos para abrir la puerta, saqué mi arma, no se que me espera-

-El lugar estaba en completo silencio, el revoletear de las palomas era lo único que se escuchaba-

-Debía tener ojos en la espalda, algo me decía que no era un lugar seguro.-

-Encontré empaques de comida en el suelo y una manta, aquí en definitiva hay alguien-

-Había unas grandes cajas de madera así que camine hacia ellas, pero antes de llegar escuché un ruido, al parecer alguien tropezó al correr-

-¡Es mejor que salgas!- grite

-No hubo respuesta-

-Seguí acercándome a las cajas, Justo cuando iba llegando sentí como alguien llegó a mi lado-

-Mi atacante venía con una varilla de hierro, por milímetros y que me golpea, lo tome de sus manos y lo lancé al suelo-

-Al caer la capucha de su saco se cayó, no podía creer que estaba viendo-

-Era un jovencita rubia de cabello en ondas con unos ojos azules igual que el mar-

-Por favor no me mate señor- la escuché decir

-Tu, ¿tu eres Samantha Holly?- pregunté

-Veía como las lágrimas bajaban por sus mejillas.-

-Señor se lo suplico no me mate-

-¿Samantha?-

-Ella solo asintió y se puso de rodillas-

-Por favor-

-No lo haré, soy un agente especial, me enviaron por ti-

-¿Taylor?-

-Si-

-Bernal dijo que vendrías por mi-

-La chica se levantó y me abrazó, podía sentir como su cuerpo temblaba-

-Agente por favor tiene que ayudarme-

-Yo estaba inmóvil, esto era lo más cercano a una manifestación de cariño que he tenido en mi vida-

-Samantha seguía aferrada a mi, tuve que soltar por un momento mi arma y abrazarla-

-Tranquila, te llevaré a la agencia, allá estarás protegida-

-¡No!- Bernal me dijo que no podía ir allá-

-¿Que? ¿Por que diría algo así?-

-Samantha levantó su rostro, podía ver esos ojos cristalinos llenos de lágrimas-

-Mencionó que estaba infiltrada, que alguien de ahí le vendió información de mi familia a los criminales-

-La agencia es lo más seguro qué hay-

-El dijo que dirías eso, así que me pidió que te diera las siguientes palabras-

-Ella suspiró-

-“La moneda no cayó ni cara ni sello, simplemente se perdió”-

-Esa era la clave que usábamos con Bernal cuando sentíamos que la misión estaba sucia-

-¿Sabes donde está Bernal?-

-Ella solo negó-

-Vamos debo llevarte a otro lugar-

-Salimos con cuidado, la subí al auto, Samantha era como un conejo asustado, no paraba de temblar-

-¿Tienes un lugar seguros donde ir?- pregunto

-No, Bernal me dio esta dirección, es lo único-

-Mierda solo hay lugar donde puedo llevarla-

-Te llevaré a mi casa-

-Todo el camino iba pensando en Bernal, ¿que carajos paso en esta misión?-

-Llegamos al edifico, Samantha se hizo a mi lado y me tomó de la mano, yo no salía de mi asombro pero debía comprenderla, estaba asustada-

-Al llegar a mi departamento le ofrecí todo lo qué hay había-

-¿Podría tomar una ducha Agente?-

-Si, el baño está a tu izquierda-

-Es posible que me preste algo de ropa, llevo dos días con esta y en verdad deseo quitármela-

-Espera-

-Fui a mi habitación, yo no tengo prendas femeninas aquí, así que lo único que encontré fue un suéter largo-

-Toma, es lo único que tengo- mencioné entregándolo-

-Es perfecto Gracias-

-¿Quieres comer algo?-

-Ella solo asintió y se marchó a la ducha-

-Hice dos emparedados, el tema de la cocina no se me da muy bien-

-Samantha salió del baño, mi mandíbula quedó en el suelo, ella secaba su cabello, el suéter le quedaba un poco más abajo de su trasero, no tenía sostén así que podía ver sus pezones, su rostro era angelical, nada que ver con la mujer que acababa de encontrar en esa bodega-

-Gracias por la ducha-

-Eee.. si de nada, ven y come algo-

-Ella se sentó a mi lado, veía su rostro, jamás en mi vida había visto alguien más hermoso que ella, su naturalidad la hacía especial-

-La veía devorar su sándwich, le serví un poco de jugo-

-¿Te preparo otro?- pregunté

-Si por favor-

-Mientras lo hacía la veía comer, chupaba sus dedos, ella era una mezcla de niña con mujer sensual-

-Aquí tienes-

-En verdad lo agradezco-

-Solo de verla comer me había quitado él hambre, solo me tome el jugo-

-Esta noche estaremos aquí pero mañana debemos ir a la agencia, debes decirnos exactamente todo lo qué pasó-

-Si tú dices que es seguro, está bien- respondió

-Al terminal ella llevó los platos a la cocina, la veía lavar, para ser una niña rica era bastante sencilla-

-¿Donde dormiré?- pregunto

-Bueno solo tengo una cama, tú duerme ahí y yo en el sofá-

-No es necesario, yo dormiré en el sofá-

-Ví como tomó unas mantas, camino hacia la sala.-

-Me duche y pase a la cama, me sentía incómodo con su presencia, nunca había traído alguien a mi departamento-

-Cuando por fin estaba a punto de quedarme dormido la escuché-

-¿Agente Taylor?-

-Si-

-¿Le molesta si duermo con usted esta noche?-

-¿Que?-

-Le juro que no soy una sinverguenza es solo que no me gusta estar sola-

-Esta bien-

-La vi como se metió bajo las sábanas, ella estaba helada, sin preguntar se acomodó en mi pecho-

-Buenas noches Agente- mencionó abrazándome-

-Buenas noches Samantha-