E.N.D

Capítulo 4: E.N.D

El nacimiento de los siete demonios se estaba convirtiendo en un problema para Missa y mantenerlos dentro del reino era una locura, el ambiente se volvió aún más tenso y peligroso para los habitantes del reino y a Mard Gear no le gustó que el reino y paradero quedan expuestos por los experimentos de Missa.

—¡Hey Missa! No sé qué diablos te sucede, que tenías en la cabeza al crear estos demonios, ¿crees que nos puedan servir?, simplemente solo son un estorbo, debes deshacerte de ellos cuanto antes. — dijo Mard Gear enfadado

—Estás loco, nunca me desharé de ellos, son la clave para crear lo que quieres y al cabo son la clave para que todo salga según tus planes, no necesitaríamos más ejército.

—Lo único que necesito es entrenarlos de una manera diferente, ellos necesitan un estímulo y se cual es solo dame más tiempo y te daré lo que quieres. – dijo Missa

—Está bien, pero debes hacerlo fuera del reino o nos descubrirán, espero que quede claro, si no me entregas a mi demonio del tiempo perfecto tú y esos errores tuyos se irán al infierno. —replico Mard Gear

Todo esto llevo a tomar más precauciones con sus experimentos y para traer a su demonio del tiempo debía salir del reino. Missa recogió lo más esencial y se llevó a los demonios al fondo de las montañas.

Fue un viaje lleno de dificultades ya que Missa no contaba con el apoyo de Mard Gear, toda la situación llego a enfurecer de una manera colosal al rey de magia negra. En una semana y media llegaron a su destino y de un cubo mágico saco todos los instrumentos para poder crear una nueva fuente de energía, a un nuevo demonio con las características que Mard Gear necesitaba, pero si lo hacia la esencia de su hermano podría desaparecer al cien por ciento.

Por unos momentos Missa dudó, había algo en su interior que le impedía continuar con el experimento, pero después de unas horas Missa decidió que eso no era importante, lo más importante para él era construir al demonio final, un demonio que lo obedezca, que logre controlar a los otros demonios, pero la duda era la misma, si Danny pierde su esencia será destruida su personalidad y nunca más se volverá a ver a ese pequeño niño feliz si no a un guerrero con sed de sangre.

A Missa le carcomía la culpa, pero la magia negra por fin lo dominó, ahora él era un mago n***o sin ningún remordimiento, él podría crear al rey de los demonios del tiempo, preparó todo, y como en sus otras creaciones fue anotando que es lo que él necesitaba, su vida estaba en las manos de Missa y pronto el rey volvería a la vida de una u otra manera.

Después de dos meses dentro de un laboratorio improvisado, Missa salió victorioso, él pensó que su creación sería la más poderosa de todo el mundo y que su plan de destruir a Mard Gear funcionaria, pero una explosión destruyó todas sus ilusiones, él pensó que su hermano murió definitivamente, pero de las cenizas salió quien llevaría a los siete demonios a la cima E.N.D el demonio final.

Por fin el rey demonio nació y fue nombrado como E.N.D para el nombre de Danny, ya no era necesario, ya que el sería el demonio más fuerte pero antes de poner su plan en marcha debía poner sus habilidades en marcha, hacer crecer todas las habilidades que les implanto y con eso necesitaba.