—A mi niño se va a poner muy feliz con la noticia —me dijo Cristina bien de la prueba de embarazo que se la enseñé. —Estoy feliz de que llevo en mi vientre El fruto del amor —le dije mientras me colocaba mi mano en el vientre mío. —Sí muchas felicidades por ti— me dijo ella antes de retirarse de la habitación. —Y Cristina se dirige hacia la puerta de salida de mi habitación y la detengo. —Cristina vaya a la tienda más cercana, dígale a uno de los choferes que la lleve y tráigame algo de bebé como de bebé unisex como un al de media, un gorrito, un chupete y dos teteros. —Okay mi niña como tú digas —me dijo muy contenta. —Sí, vaya, pero no sé demore que es para hacerle una sorpresa a Max. —Okay sí está bien voy enseguida —Sí a lo que usted viene Yo iré a la cocina a prepararle algo

