Damian y Brenda ingresan a la habitación, ella se acerca al lado de la cama de su amiga y le toma la mano. Varo se pone en pie y ve a Damian, su sobrino le mira con los ojos entrecerrados y Álvaro le toma del brazo, le aparta de Brenda y le advierte que una historia tiene más de una versión.
—¿Mina, cómo te sientes?—pregunta Brenda.
—No sé qué me dieron, pero me siento relajada —Damian sonríe.
—¿Recuerdas algo?
—No.
—El médico dice que puedes venir con nosotros a casa. Te vigilaremos, estamos cerca del hospital. —dice Brenda y le acaricia el pelo. —¿Te parece?
—Claro, mejor que estar sola en el hospital.
—Puedes venir a casa. —Le dice Varo. —Yo puedo cuidarte. Puedo contratar un médico y una enfermera.
Damian le dice que ellos están más cerca y que puede contratar también pers
