—Eso no es verdad, tú no puedes hacerme eso soy tu madre —me dice alzando la voz —No soy su hijo —le grito —una madre no echa a la calle a su esposo con su hijo de tan solo dos años, usted perdió ese derecho —le digo muy alterado, mi madre trata de abrazarme cuál rechazo y me acerco más a esa señora —que es lo que quiere dígamelo de una vez, qué pretende con hacerme daño y téngalo por seguro que no lo va a lograr —le digo muy cerca de ella, agarre valor para hacerlo y no sé dé donde, tengo muchos sentimientos que no puedo expresar lo que siento en estos momentos. —¿Qué es lo que quiero? Que me puede ofrecer un pobre diablo como tú —dice señalando a mi padre, —eres un muerto de hambre, yo te saque de la pobreza dónde estabas, gracias a mí, mi padre te dio trabajo y te enseño a hacer negoc

