Una semana duró el paseo de luna de miel adelantada de Antonio y Luciana besos, caricias y pasión no faltaron era algo nuevo para ambos estar con otra persona y amarla tanto Luciana no quería irse de la cabaña jamás, pero ambos tenían responsabilidades. -"Y esa cara, mi amor"....., pregunta Antonio y ella le hace un pequeño puchero. -"No me quiero ir, mi amor, quisiera quedarme para siempre aquí contigo, pero - "No me quiero ir, mi amor, quisiera quedarme para siempre aquí contigo, pero no se puede"...... Antonio se acerca y le besa la mano que tiene el anillo -"No pasa nada, mi amor, prometo que te traeré aquí en la luna de miel y, si quieres, compramos una mansión para nosotros te amo, reina"..... Luciano no podía con tanto; él era perfecto y era suyo y de nadie más. -"¿Qué te parece

