Capítulo 26: Rosa que te odio rosa

1475 Words

Los días pasaron conmigo tratando de negar lo innegable, que era un maldito puberto encendido todas las noches por Elle Fernández. Las consecuencias biológicas de mi despertar s****l tenían una sola culpable, una culpable que debía mantener bien lejos de mí mientras organizaba mis ideas. Aterrado por todo esto que me hizo sentir Elle corté comunicación con ella y le pedí a Recursos Humanos que se encargase de darle nuevas asignaciones. Asignaciones que dejaron de hacerla mi asistente como tal y tener que venir a mi casa. A mi morada sagrada que ella había violentado con su instinto s****l desmedido. Mi subconsciente lo sabía, que tarde o temprano Elle encontraría una forma de destruirme desde el fondo y doblegarme. ¿Cómo era posible que el catalizador hubiesen sido unos malditos labios

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD