Capítulo 19
Cuando escuche la pregunta de su amigo me paralice detrás de la puerta, sé que es de mala educación escuchar las conversaciones de los demás, sin embargo esto tiene que ver conmigo. Escuchar su respuesta me da ánimos, no dice que me ama. Pero tampoco lo niega, aprovecho que él está entretenido y salgo de la casa, aunque decida aceptar lo que me propone tengo que decírselo primero a Berenice. Fue difícil conseguir un taxi ya que es una zona de gente rica, aquí todos tienen autos importados, no necesitan algo como un taxi, tuve que caminar por al menos cinco calles. Entro en la casa y está en silencio, una luz sale de debajo de la puerta de Berenice, me acerco y llamo, ella sale despeinada y con rostro de sueño, mira su reloj.
– Llegas a casa bastante tarde – hago una mueca
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