Capitulo 21

1012 Words

Ella tenía un gran reflejo nauseoso. Después nos besamos y tragué un poco de mi líquido preseminal de su boca. No me importó. Ella también me escupió en la cara. ¡Ella era luchadora y me gustó! No tardé mucho en devolverle el favor y comerle el coño, arrodillado al borde del sofá. Primero lo olí como un perro. Yo era como un hombre que acababa de salir de prisión. Había pasado casi un par de meses desde que no metía mi lengua, mis dedos y menos aún mi polla, dentro de un coño cálido. La comí bien y ella empezó a gemir hasta ponerse a gritar. Por lo menos no molestaríamos al vecino de arriba. Con la cabeza entre sus piernas, me asfixió y empezó a mojarse. Dejé que uno de mis dedos se quedara en su ano, tanteando el terreno (o por así decirlo), y gracias a Dios, estaba receptiva. D

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD