Noah: Me acomodé la corbata sintiéndome satisfecho, Allie había firmado el contrato y ya no se escaparía de mí. —Noah, ¡qué te sucede!, ¿acabas de contratarla y ya la mandaste asustada a su casa? —dijo Jeremy entre gracioso pero también había una seriedad en su mirada. Lo enfrente. —Esto no te incumbe Jeremy. Él negó. —Espero que sepas lo que haces, amigo. —Por supuesto —dije sentándome en la silla de mi escritorio y me acomode la entrepierna del pantalón. Allie me había dejado totalmente excitado, ahora tendría que esperar para verla. —Sabes, no entiendo, dijiste que no querías distracciones —dijo Jeremy confundido. —Solo te diré algo, con Allie es distinto. Fin de la historia, ahora vete. Tengo trabajo que hacer —le dije molesto. Él levantó sus manos. —Ok jefecitó me voy antes de

