Capitulo 4

1526 Words
Después del doloroso rechazo de Leonard, el corazón de Alexa se sentía pesado y su mente estaba llena de emociones encontradas. Sentía una mezcla de tristeza y rabia. Aunque sus palabras la habían herido, ella no permitiría que la derribara. Sabía que era más fuerte de lo que él creía, y no iba a dejar que su rechazo la definiera. *ੈ✩‧₊˚*ੈ✩‧₊˚*ੈ✩‧₊˚*ੈ✩‧₊˚*ੈ✩‧₊˚*ੈ✩‧₊˚ Me levanto temprano en la mañana, tomo una ducha, al salir me deslizo en unos pantalones ajustados y una camiseta holgada, perfecta para moverme con facilidad, me pongo unas zapatillas, me hago una coleta alta, ya lista para salir me miro al espejo y me encuentro con unos ojos grises llenos de determinación. Estoy lista para enfrentar lo que el día tiene reservado para mí. Desciendo las escaleras, con cuidado de no caerme. Mientras camino hacia la cocina, el aroma del café y tortitas recién hechas me da la bienvenida. Mi madre siempre se levanta temprano para preparar el desayuno, y agradezco su amor y dedicación. — ¡Buenos días! —¡Buenos días hija! — ¿Dónde está mi padre? — Tu padre esta visitando al alpha Luis de la manada red moon, ¿ cómo te sientes hija? — Estoy bien mamá — ¡Ay! hija, se que sufres por el rechazo de tu mate, pero prometo que todo se arreglara tu mate se dará cuenta de su error al rechazarte. — Me conoces tan bien madre, pero no creo que Leonard cambie de opinión. — Ya verás que si hija, solo confía, nuestra diosa luna nunca se equivoca. — Esta vez sí madre, esta vez sí. Al terminar de desayunar, llevó los platos al fregadero, luego voy en busca de mi mochila y me voy directo al instituto, al llegar me encuentro con susan y los chicos. Me acerco a ellos con una sonrisa forzada en el rostro. Trato de ocultar mi tristeza detrás de una fachada de normalidad, pero sé que mis amigos pueden ver a través de ella. —¡Hola, chicos! ¿Cómo están todos hoy? ¿ Amiga? —pregunto, tratando de sonar entusiasta. — ¡Amiga, chilla Susan! — ¡Enana responde Eliam! — ¡Pequeña dice Cedric! Con sus miradas preocupadas —. ¿Estás bien? — Asiento con la cabeza, evitando hacer contacto visual. — ¡Oh! amiga, sabes que estoy aquí para ti, y para romperle la cara al estupido de Leonard por rechazar a mi amiga. — No puedo evitar soltar una carcajada al escuchar a mi amiga decir eso. Al mirar más allá puedo ver a Leonard junto a sus amigos y la zorra de Britany, quien está parado a cierta distancia mirando hacia donde estoy, Me siento incómoda con su mirada después de lo sucedido, al darse cuenta de que lo miro este se acerca a la zorra y la besa, mientras la besa sigue mirándome, pero no le dejaré ver que eso me afecte. Decido ignorarlo y seguir con los chicos hacia nuestras clases. Voy directo hacia mi aula, me siento en el último asiento, al rato entra Leonard y se sienta al otro extremo del aula con sus amigos, un momento después llega la maestra e inicia la clase. Me sumerjo en mis pensamientos mientras intento prestar atención a la lección. Aunque mi mente está en otra parte, trato de enfocarme en el tema que se está discutiendo. Sin embargo, siento la mirada intensa de Leonard, quien está sentado en el otro extremo del salón. Después de lo ocurrido entre nosotros, las interacciones entre Leonard y yo son tensas e incómodas. Trato de evitar cruzar miradas con él y apenas intercambiamos palabras. Aunque intentó mantener una actitud indiferente, no puedo evitar sentir una mezcla de tristeza y rabia cada vez que lo veo. La clase finalmente llega a su fin y el timbre anuncia el descanso. Me levanto rápidamente de mi asiento, lista para salir del salón y tomar un respiro. Sin embargo, antes de que pudiera hacerlo, escuchó una voz conocida detrás de mí. —Alexa, espera un momento, por favor —dice Leonard en tono serio. Sus palabras me sorprenden, aun así, sigo mi camino, no doy varios pasos cuando Leonard me sostiene del brazo, escucho como Britany le reclama — ¿que haces amorcito? ¿que tienes que hablar con esta sucia omega? — Callate Britany largo de mi vista. — Pero amorcito porque me hablas asi, yo soy tu luna. — Que te largues, te lo ordeno como tu alpha. Veo como la estupida se va enfadada, me giro para enfrentarlo. —¿Qué quieres, Leonard? —pregunto, tratando de mantener la calma. Él se acerca lentamente, con una expresión apesadumbrada en su rostro. —Quiero disculparme, Alexa. Sé que te lastimé y te hice pasar por mucho dolor. Fui un idiota al rechazarte y no te merecias eso. Sus palabras me toman por sorpresa y veo un destello de arrepentimiento en sus ojos. Por un momento, no sé qué decir. Las emociones dentro de mí están en guerra, pero decido escuchar lo que tiene que decir, una parte de mi quiere mandarlo al demonio, pero la otra quiere escuchar lo que tiene que decir. —Dale una oportunidad,dice Akira. — No estoy segura, no quiero que sufras akira. — Alexa su lobo klye no quería rechazarnos el nos ama. — No lo se. — Por favor, yo amo a klye, no nos separes, no es su culpa que su estupido humano nos rechazara. — Está bien. Decido escuchar lo que tiene que decir. —Lo que dijiste fue cruel, Leonard. Me hirió profundamente —le digo con voz entrecortada, luchando por controlar mis emociones. —Lo siento de verdad, Alexa. Me equivoqué al dejarme llevar por el miedo y la inseguridad. Nunca debí rechazarte de esa manera. Me gustaría poder retroceder en el tiempo y cambiarlo, pero no puedo. Solo puedo pedirte perdón y prometerte que seré mejor. —Sus palabras resuenan en mi interior y veo la sinceridad en sus ojos. Una parte de mí quiere creerle y darle una oportunidad, pero otra parte tiene miedo de volver a ser lastimada. Respiro hondo y finalmente respondo: —Está bien, Leonard. Acepto tu disculpa. Un atisbo de esperanza brilla en su rostro y veo gratitud en sus ojos. —Gracias, Alexa. Haré todo lo posible para demostrarte que puedo cambiar y merecer tu confianza. —Pero no puedo darte una oportunidad, me lastimaste demasiado, me rechazaste aun sin conocerme, me juzgaste sin darte la oportunidad de conocerme, le digo tratando de mantener la firmeza en mi voz. Él baja la mirada, pareciendo avergonzado por sus acciones pasadas. Sus palabras son suaves y llenas de sinceridad cuando responde: — Lo se, se que te lastime, Me equivoqué al juzgarte tan rápidamente,que no te merezco como mi mate, Me dejé llevar por el miedo y la inseguridad, y eso fue injusto para ti, Pero te prometo que he aprendido de mis errores y estoy dispuesto a demostrarte que puedo ser diferente, te conquistare. Después de escuchar las disculpas de Leonard, mi mente se vuelve un caos de emociones. Por un lado, siento un destello de esperanza al ver su arrepentimiento y sinceridad en sus ojos. Por otro lado, la herida de su rechazo aún está fresca en mi corazón y temo volver a ser lastimada. No puedo ignorar todo el dolor y la confusión que experimenté cuando él me rechazó sin siquiera conocerme. Aunque sus palabras son reconfortantes, mi corazón todavía está lleno de cautela. No quiero dejarme llevar por las promesas vacías y correr el riesgo de ser lastimada nuevamente. —Leonard, necesito tiempo para sanar y procesar todo lo que ha sucedido. No puedo darte una oportunidad de inmediato. Tengo miedo de volver a confiar y ser lastimada de nuevo. —le explico, buscando su comprensión. Él asiente, aceptando mis palabras con humildad. —Lo entiendo, Alexa. No puedo obligarte a perdonarme o darme una oportunidad. Pero te prometo que estaré aquí cuando estés lista. Haré todo lo posible para ganarme tu confianza y demostrarte que puedo ser el compañero que mereces. Sus palabras me tocan profundamente, pero sé que no puedo dejarme llevar por las palabras bonitas sin considerar todas las consecuencias. Aún hay miedo en mi corazón, pero también una pequeña chispa de esperanza. —Estaré esperando, Alexa. Haré todo lo posible para demostrarte que he aprendido de mis errores y que realmente me importas. Con eso, nos separamos y continúo mi día en el instituto. Aunque las heridas de mi corazón aún están presentes, siento un ligero alivio al haber expresado mis sentimientos y establecer límites claros. Sé que el camino hacia la curación no será fácil, pero estoy dispuesta a enfrentarlo. A medida que avanzo en el día, mis amigos me rodean con su apoyo incondicional. Susan, Eliam y Cedric están ahí para mí, recordándome que no estoy sola en este proceso. Su amistad y lealtad me dan fuerzas para seguir adelante Continuara…
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD