EMILY Tom me estaba dando más problemas de los que quería, ya ni siquiera me asombra. Hace cinco días le llegaron los papeles de divorcio que él se negó a firmar pese a la insistencia de mi abogado y la mía. No he querido verlo, pero si nos hemos gritado por teléfono varias veces. ¡Jodido imbécil! Mi teléfono suena sobre la mesita y noto que Cristina me está llamando, ha estado conmigo estos días y también le dedico algunas groserías a Tom por teléfono cuando yo ya no tenía más paciencia para lidiar con él. Además, no me he estado sintiendo bien estos días que asumo debe ser por todo el estrés asiqué un par de noches la tuve conmigo. -Cariño- Me saluda- Como te encuentras hoy? -Pude desayunar-Se ríe- Eso ya es un avance. -Seguro te pegaste alguna bacteria mexicana- Resoplo- Bien a lo

