Hannah —¡Mellizos! Cielo santísimo... ¡Que puntería!—Exclama Sofía después de contarle que espero dos bebés. —Cuando escuché a la doctora darle la noticia, casi me desmayo—. Agrega Sebastian, llevándose una mano temblorosa al pecho. Fue una suerte que estuviese sentado, de lo contrario, habría terminado golpeando su cabeza contra en suelo del consultorio. —Si antes tenías que cuidarte, ahora tienes que hacerlo al triple, Hann. Según lo que he escuchado, los embarazos múltiples son más riesgosos.—Argumenta Sofía acariciando mi hombro. —Lo sé, la doctora ya me explicó los riesgos y los cuidados que debo llevar para tener un embarazo sano. De hecho, ya tomé mis primeras pastillas prenatales, Sebastian se encargó de comprarlas para mí—. Explico acariciando la mejilla de mi amigo. Agradez

