Capítulo L: Un amor que no pudo ser III

1827 Words

—No quisiste escucharme y yo no estaba dispuesta a suplicarte que lo hicieras, Markus. No tenía la cara para reclamarle, mucho menos para ofenderme ante sus palabras llenas de verdad, sin embargo… Lo hice. —Debiste insistir, Edda. De haberlo sabido… —¿De haberlo sabido qué?—me interrumpió, con dificultad se incorporó hasta estar sentada en la cama y prosiguió, sus ojos me miraban con rabia y dolor y eso me partió el alma—¿Habrías dejado a tu mujer? Sí hubiera suplicado que me escucharas, ¿habrías cambiado de opinión, Markus? ¡Responde! —S-sí—balbuceé—, lo habría hecho, Edda. Ella por un segundo sonrió, pero no era una sonrisa de felicidad. Esa sonrisa fue amarga, cargada de escepticismo. —Mientes. No la dejaste cuando decías amarme, ¿crees que la dejarías cuando ya la amabas a ella?

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD