Capítulo XLVII: Edda Schneider

1268 Words

Hannah A pesar de ser un vuelo de más de diez horas y al cuidado de dos pequeños de cinco meses, el viaje no fue agotador, al menos no físicamente, pues mentalmente estoy desecha. Hermes sigue dejando muy en claro que es el mejor hombre que existe. La mayor parte del vuelo, él se hizo responsable de nuestros hijos, de nada sirvió que me negara, pues cada vez que lo hacía, me decía que yo debía estar relajada. Aunque no sirvió de mucho, mi mente no dejó de maquinar pensamientos deprimentes, además, desde que subimos al avión, sentí una especie de opresión en el pecho que no me dejaba respirar con normalidad, era algo inexplicable e indudablemente horrible. Lo atribuí a los nervios de viajar por primera vez con mis hijos, también a la conversación que pronto tendría con mi padre y me rep

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD