CRISTOPHER
Me encuentro tirado en mi cama, después de aquella conversación con Agna, tuve que volver a mi casa antes de ir a cometer una locura, no puedo sacarme sus palabras de la cabeza, y sé que estoy siendo terco, obstinado, debería dejar las cosas hasta aquí, pero mi lado más egoísta, ese lado obsesivo se niega a retroceder.
No puedo creer lo que me había dicho ¿Le gustaba ese imbécil? ¿Le gustaba ese imbécil y no yo? Esto tenía que ser una broma ¿Cómo le podía gustar ese idiota? ¿Quién se cree que es? ¿Por qué me siento así? ¿Por qué tengo tanta rabia al saber que le gusta alguien más y que ese alguien más es el idiota de Ilán? ¡Tengo que gustarle yo! ¡Yo soy el único que le puede gustar! La voy a enamorar, voy a jugar con ella a mi antojo, voy a hacer que olvide a Ilán y que sol
