ELEGAR Los traidores no podían ser perdonados y cuando se trataba de una conspiración ningun rey debía actuar con recelo. Debía tener claro que existían ciertos momentos donde la clemencia era requerida pero cuando su vida estaba en riesgo, debía tomar el camino contrario a la misericordia, aunque el acusado gritara que estaba arrepentido. Su corte era desagradecida e hipócrita. El viaje de regreso desde Zenurbia fue largo, pero Ivannia lo usó con determinación para poner en orden muchos de los pensamientos que la agobiaban. Su actitud estaba teniendo una batalla con las circunstancias y ya no se sentía tan confiada al sentarse delante de esos ancianos, pensado que el hecho de que se arrodillaran ante ella, lo era todo. Su esposo habia tendido la mano para ayudarla a bajar del carruaje

