Nicholo
—Amor, amor ya despierta— Agnese mueve un poco mi cuerpo —Es hora de desayunar—
Sonrió complacido por despertar así, si fuese la serpiente nos fuera echado agua fría.
La tomo por los brazos para abrazarla fuerte —Como te extrañe, mi amor— Escucho su risa.
—Nicholo— Se acomoda mejor —Vamos a desayunar, pedimos tocino— Besa varias veces mi cuello —Vamos, vamos, luego iré con Patrick por un vestido para esta noche—
Suspiro —Bien, vamos, pero no te dejare ir después de esto— La dejo libre y ella rápidamente se escapa soltando risa.
Voy al baño a prepararme para al menos verme decente para el desayuno, lo bueno es que será aquí mismo en la suite y no tendré que arreglarme tanto para ir al restaurante del hotel.
—Buenos días, chicos— Saludo a mis hermanos y voy con Agata quien pre
