00 - Emma

2101 Words
Desde niña siempre he soñado con conocer a alguien que me muestre el sentido de la vida, el cómo es sentirse querida por alguien y protegida. Recuerdo que antes era una niña alegre y feliz que no vivía en preocupaciones, solo en una burbuja llena de inocencia que me permitía vivir de manera alegre. Mi vida es resumida, termino a mi corta edad después de que un accidente me arrebatara a mis padres, quitando en mi vida lo más valioso para mí en ese momento. Siento que si no fuera por mi hermano ni siquiera seguiría aquí, he afrontado tantas cosas que me ayudaron a madurar, pero esas cosas siempre eran dolorosas. Y aunque todos me vean siempre feliz, en realidad lo único que me hace feliz es estar escondida de todos, enojada con todos por lo sucedido con mis padres. Me arrebataron los recuerdos que tenía de mis padres dejando mi memoria en blanco cada que trato de recordar cosas, no quiero permitir que su imagen se borre por completo de mí. Es lo último que me queda. Y con enojo porto siempre una fotografía de ellos, para siempre recordarlos. mi vida siempre se siente tan vacía y sin significado, muy apenas mi hermano logra sacarme de mi lugar seguro para que pueda llevar el paso de todos. Es complicado, más desde que el mundo se dividió en dos clases. Una parte del mundo está en un apocalipsis después de que aquellas bestias salieran de sus escondites para poder salvar al mundo, es lo que ellos dicen, y obvio los humanos reprochan la idea de que seres como ellos existan. Es una rivalidad. Tan solo fue hace 5 años que eso sucedió, por completo la vida de todos cambio de forma tan drástica. Al punto de que era peligroso en un inicio salir a las calles por las miles de peleas contra estos individuos, era claro que su fuerza es inexplicable. nada los detuvo a su paso. Y ahora nosotros los humanos vivimos dentro de edificios con base en sus reglas, para mantenernos de una forma controlada. Tantas muertes hicieron que gobernantes de todos los países hablaran en paz con aquellos seres que ahora lideran por completo nuestra sociedad, ya que no eran simples especies salvajes, eran personas como nosotros que se escondían entre todos, teniendo por así decirlo una vida normal. Gente con dinero o. de simple buena economía, eso eran ellos, personas con más poder que los demás. Pocas cosas he descubierto de ellos y tengo miedo, no sé quién es quien ahora, tan solo me mantengo aislada. He escuchado que esas especies tienen algún vínculo que los une con nosotros como parejas. Es horripilante. ¿Quién quisiera ser pareja de esas cosas? Pero a la vez termino llena de curiosidad por algo que recuerdo de manera borrosa, mis padres alguna vez contaban historias sobre esos seres que me hicieron afrontar los sucesos de estos últimos años como si aquellos cuentos se volvieran realidad y tuvieran sentido. Son seres especiales y yo, al igual que ellos soy especial o eso mismo decían mis padres por la peculiaridad de mis ojos que no encajan de ninguna forma con ningún otro humano. No es muy común verlos. Es de una forma complicada y difícil de hablar, ni yo logro entender lo que pasa cada día. Reacciono al sonido de la alarma y parpadeo dejando a un lado el techo, hace no más de 2 h me desperté, siempre me sucede lo mismo desde hace 5 años. Es incómodo. A veces un sueño acompaña el que me despierte de manera rápida sin yo querer y después termino olvidando lo que soñé. Es extraño. Hago a un lado la cortina, observando desde mi ventana el amanecer, mirando las montañas que nos separan del distrito que conforman aquellas especies. Se prefirió vivir separados por el momento para mantener la seguridad dentro de la zona de humanos. Creo querían evitar más conflictos entre esas cosas y nosotros, nadie termina de asimilar aún la idea de compartir la tierra con ellos. — ¡Emma!—abre la puerta mi hermano—. Pensé que aún dormías ¿pesadillas?, preferiría que durmieras para levantarte a la fuerza —niego, su manera de despertar es golpearme con una almohada—. ¿Está todo listo? —. Los ojos color ámbar de mi hermano, Carter, observan la habitación que está por completo ya vacía. De alguna forma eso termina afirmando su pregunta y solo se va con una sonrisa, es el único feliz en dejar este lugar, no lo entiendo, no sé ni yo misma a donde voy. Fue tan inexplicable por el hecho de como llego notificando hace unas semanas que saldríamos de los edificios a una zona segura donde están recibiendo a personas con poder, mi familia siempre ha tenido un nombre en la sociedad. De alguna forma fui afortunada por nacer siendo rica y llena de dinero. Solo me faltan mis padres, algo tenía que dar a cambio de esto, ¿cierto? Salgo de mi habitación siguiéndolo sin querer dejar el lugar donde en tan solo poco tiempo me había acostumbrado. — Solo 5 minutos más, por favor —. Suplico. — Ese tiempo solo se te otorga para bañarte y comer algo antes de irnos, es un viaje largo. Estoy emocionado —. Comenta regresando su vista al celular. Me quedo quieta por un minuto pensando en si tengo algo más que hacer antes de irme, suspiro un poco sintiendo algo de incomodidad en mi hombro, rasco mi lunar algo irritada. En estos últimos meses sin explicación, pica en esa zona, camino hacia el baño observando en el espejo mi lunar en forma de luna. Es tan peculiar de ver. Y no parece tener explicación alguna de porque tengo dicho lunar, Carter no sabe tampoco por qué tengo dicho lunar si nadie en la familia tiene algo parecido. Supuse que lo herede de mis padres, algo que me puso feliz, pero después mi hermano lo descarto de manera rápida para que no tuviera ninguna cosa errónea de los antecedentes familiares. Él tenía 15 años cuando paso el accidente y nada ocurrió con él, fue el único ileso de toda la familia, mientras que yo perdí todos mis recuerdos y solo permanezco con lagunas de algunas etapas de mi niñez. Solo se encargó de mí para que supiera algunas cosas, fue difícil para ambos. — No te hagas la tonta, el tiempo corre y solo tú faltas de estar lista. Voy a preparar el desayuno mientras te bañas —. Asiento mirándolo por el espejo notando apenas que es cierto lo que dice, él ya está vestido y más que despierto, pero es su rol. Carter siempre es activo y alguien con grandes cosas en mente, yo solo soy alguien que sigue respirando sin saber bien como sigue con vida. — En 5 minutos estoy lista, ¿feliz? —. Él asiente yéndose. ⋆⌘⋆ Miro el reloj en mi mano, ya todo está listo o eso parece, no estoy segura. Solo soy alguien que sigue a mi hermano sin reprochar mucho, con él estoy a salvo. De alguna forma es lo único que me queda y prefiero comportarme bien con él sin ser un estorbo por completo para él. Observo la puerta, Carter dijo que esperara mientras subía algunas cosas al carro. Iremos directo a aquel lugar en carro, menciono que solo son 5 horas en viaje, algo que me tranquiliza un poco, pero siento miedo. Ir en carro es algo que odio, tan solo recuerdo leves cosas de aquel accidente y me duele el corazón. Es algo que no puedo soportar y que nadie entiende, ninguno de mis doctore entendían qué sucedía conmigo. Todos son unos inútiles a excepción de mi hermano, quien es él único que trata de ver una vida mejor para los dos. Sonrío cuando la puerta del departamento se abre y Carter aparece, me sentía asustada por algún extraño presentimiento que me persigue siempre que estoy sola. — ¿Lista? —. — Nunca —comento desanimada—. Preferiría quedarme aquí y ya, no necesito un lugar más seguro que aquí —. — Emma, prefiero ese sitio… la última vez que tuviste un ataque en tus sueños decías que algo venía por ti y te llevaría con él a toda costa. Me preocupa eso y este lugar no es muy seguro para ti —. Sus palabras muestran una preocupación que pocas veces es notable en él, es algo desesperado al solo escucharlo. Asiento rendida; — No sabía que gritaba dormida, tampoco recuerdo bien eso. Pero está bien, todo lo que tú digas está bien —. Finalizo con una sonrisa. — Sube tu primero al auto, yo bajo en un segundo con la última maleta —. Dijo extendiendo las llaves del auto. No dije nada más y solo tomé las llaves, salí del departamento con una cobija en mis manos. El camino lo hice en silencio y para mi suerte, sin toparme con gente, llego al primer piso, donde es la entrada al edificio y salgo mirando el carro a un lado de la entrada. Me detengo por un momento sintiendo una extraña sensación, giro mi rostro hacia todos lados intentando descubrir que está provocando mi incomodidad, pero no logro ver nada. Me encojo de hombros y camino hacia el auto, y de nuevo me vuelvo a detener. Mía. Aquel susurro me deja helada en mi lugar, parecía como si alguien estuviera a mis espaldas murmurándolo. Trago con fuerza la saliva detenida en mi garganta por lo sucedido y con rapidez entro al auto para sentirme un poco segura, pongo el seguro y miro con precaución hacia todos lados. Alguien toca la puerta del piloto y me exaltó asustada, pero es en vano porque solo es Carter y le abro. — ¿Todo bien? —asiento—. No parece, algo te asusto —. — Solo fue algo extraño, pero ahora estoy bien —. Sonrío un poco. — Recuerda que cualquier cosa que suceda, hay confianza para que lo cuentes sin ser juzgada —asiento—. Bueno, ¿estás lista? Será un largo viaje si hay algún obstáculo. Así que ponte cómoda, pequeña —. Expreso con una sonrisa que surco de manera suave en sus labios, a veces no entendía por qué él siempre parecía estar bien y al contrario de mí, nunca mostrando tristeza o impedimentos. Tan solo siento que algo sucederá, cada que despierto un dolor en mi pecho me hace sentir angustiada y asustada. Soy fuerte, pero también débil. ⋆⌘⋆ Suspiro mirando un poco mi entorno, había dormido al instante en el que salimos de la zona de edificios, había seguridad junto con nosotros para que ningún problema sucediera, pero algo sentía mal en ese momento. Mi preocupación era evidente, puesto que Carter me miraba varias veces intentando leer mis ojos para saber qué ocurría. — ¿Podemos detenernos? —lo miro—. Algo anda mal, por favor paremos. Siento que va a suceder —. — ¿Segura? —. Asiento sin pensarlo dos veces. — No debes de dudarlo —. Él asiente, pero se detuvo al instante en seco. Mire hacia enfrente y los dos carros que iban adelante nuestro también estaban detenidos, corrí mi mirada hacía a un lado observando como había unos carros enfrente y me preocupe. — Espera aquí, deja ver que sucede —. Negué al instante. Pero ni siquiera me hizo caso, Carter ya había salido del auto. Mi pecho comenzó a doler de manera inexplicable, nunca antes había sentido tal dolor, pero creo que es la angustia y preocupación de que nada sucediera. Carter volvió algo serio mirando hacia distintos lados, no note nada en su mirada que me digiera que ocurría, era extraño. — Un gobernante fue atacado por una bestia, por eso están varios carros detenidos —dijo al instante en el que entro—. Nadie sabe bien qué ocurrió, pero dicen que sigamos nuestro camino. Parece que ya está todo controlado, como quiera en la gasolinera más cercana nos espera un helicóptero para mayor seguridad —. Respire con más tranquilidad, dejando a un lado aquel dolor para no dar más preocupación al asunto, por lo que dijo, estoy segura de que aquel gobernador hizo algo contra aquellas cosas o es parte de ellos. Una norma impuesta para ese acuerdo de paz entre ambos mundo fue no tocar a ningún humano o provocar daño a alguien de otra especie, el castigo era la muerte.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD