Capítulo 8||

1355 Words
Emma Jackson Despierto por el molesto sonido de mi alarma, el cual esta programado para sonar ciertos días como hoy lunes, en el cual me toca asistir a clases por la mañana, aunque dudo mucho que asista, tengo una fuerte resaca, pareciese que en cual momento se me va a explotar la cabeza, al parecer tomé demasiado anoche, espera... Anoche... ¿Qué demonios ocurrió anoche? ¿Y cómo diablos se supone que llegué hasta aquí? No recuerdo ni una puta mierda de lo ocurrido, pero tampoco le voy a dar vueltas al asunto de seguro recordaré más tarde, a demás lo más probable es que Scar me hubiese traído a casa. Termino de pararme de mi cama para luego entrar al baño y poder darme la ducha que realmente mi cuerpo necesita y aclama, luego de alrededor de unos diez minutos salgo del baño para seguido colocarme unos jean con las rodillas algo rasgadas y un polo blanco que me queda algo grande pero que aún así me encanta. Pues amo la ropa holgada. Salgo del edificio para ir directo a la universidad, encontrándome con el señor Juan en la puerta, es quien trabaja todo el día cuidadando las entradas y salidas del edificio, así que lo más probable es que supiese cuando y como llegué aquí, por lo que me dirijo hacía él. —Buenos días, señor Juan —Le saludo de manera cortes con una pequeña sonrisa en mi rostro. —Buenos días señorita Emma —Me saluda de igual forma. —¿Se siente usted mejor? —Pregunta haciéndome fruncir el ceño ¿Cómo sabía que no me sentía bien?, pues es obvio que si sabe mas que algo. —Me duele un poco la cabeza pero estoy bien. ¿De casualidad sabe usted cómo llegué aquí anoche? —Pregunto con una expresión bastante confundida y lo estoy, no recuerdo nada a partir de cuando Scar se fue con Alex. Ese es mi último y total recuerdo. —Si, un amigo la trajo e incluso la llevó hasta su habitación, pues parecía estar muy ebria, aunque pensé que estaba enferma ¿No recuerda nada? —Claro que no recuerdo nada, es justo por lo que le estoy preguntando. No sea tarado, ¿Pero un amigo? ¿Qué amigo? ¿Alex...? Tiene que ser él , no tengo amigos, mi única amiga allí es Scar. —No, bueno gracias. Me tengo que ir, voy algo tarde, adiós. —Me despido y salgo corriendo a penas escucho un hasta luego de su parte. Tomo un autobús para ir directo a la universidad ya son las 7:40 am y tengo mi primera clase a las 8:00 am, que por desgracia es álgebra. Justo a las 7:55 llego, corro por los pasillos, casi totalmente desolados rezando por que la maestra no haya llegado. La puerta del aula esta cerrada lo que me hace preocupar, ya que siempre se mantiene abierta al menos que este un maestro allí, al parecer ya ha llegado. Toco la puerta aún así, sin esperar o retrasar el tiempo más, la maestra abre la puerta de inmediato con una cara de muy pocos amigos mientras que yo dibujo la sonrisa más falsa y nerviosa de mi vida en mi rostro. —Buenos días maestra Cloi , ¿Puedo pasar? —Pregunto en un susurro a penas audible. —Joven Jackson, ¿Es consciente de qué ha llegado tarde? Espero que tenga una muy buena excusa para mí. —Dice con su dura mirada posada sobre mí. —La verdad es que no tengo ninguna excusa para usted, solo se me hizo tarde. —Suelto encogiendo mis hombros. —En ese caso no podrá pasar a mi clase, por favor vaya a la biblioteca. Y así lo hago, entro y me registro con la señora que se encarga de apuntar a cada persona que se lleva y trae libros. Camino y me siento al fondo donde no hay nadie, pues si voy a leer necesito concentrarme, tomo uno de los libros que se encuentran sobre dicha mesa el cual se titula "La dama y el perro". Empiezo a leer la introducción perdiendo el interés por completo del libro no se si el desarrollo vaya a estar más interesante pero de todas formas lo descarto. Tomo otro libro de la mesa el cual esta vez se titula "No todo lo que empieza mal termina mal", logra captar algo de mi interés con dicho titulo, así que lo empiezo a leer. "La pequeña jennie, se había quedado sin padres a penas nació convirtiéndose así en una niña huérfana, debido a una mala práctica de cesaría que le practicaron a su madre, la niña logró sobrevivir pero su madre no corrió con la misma suerte, el padre de la pequeña jennie abandonó a su madre en el momento en el que le dijo que estaba embarazada con la excusa de que tenía un futuro por delante y no quería interrupciones , la madre de la niña lo dejó marcharse sin insistir más en el tema pues quería que el logrará conseguir su sueño y felicidad ya que ella a penas supo que estaba embarazada de una pequeña bebe fruto de el amor que sentía por él ya había conseguido su felicidad. La pequeña jennie fue enviada por los doctores directo al orfanato ya que no había aparecido nadie quien reclamará la hermosa bebita. A penas cumplió sus 2 años recibía maltratos por parte de las monjas quienes al parecer no tenían un buen corazón, luego de 3 años la niña por fin había sido adoptada por una familia la cual anhelaba tener una niña pues tenían tres hijos y todos le habían salido de sexo masculino por lo cual decidieron adoptar a la pequeña jennie quien fue amada por toda la familia..." Siento el flash de una cámara sobre mí, por lo cual levanto la vista encontrándome con el mejor amigo de Aron, Lucas, nunca hemos conversado y mucho menos sido amigos, así que no se por que demonios estaba tirándome una foto o bueno es a lo que todo apunta. —¿Me acabas de tomar una foto? —Me atrevo a preguntar con mi ceño bastante fruncido y mi mirada algo fría, con la clara intención de intimidarlo, pero como suele decir Scarlett no logro intimidar ni siquiera a una mosca. —Sí. —Admite. —Te veías muy hermosa concentrada y no lo pude evitar.—Responde como si fuésemos de lo más cercanos. —¿Y qué leías? —Vuelve a preguntar al recibir un silencio de mi parte. —Perdona, ¿me hablas a mí? —Pregunto todavía extrañada por su actitud. —Pues sí, al menos que no seas Emma Jackson y seas su gemela claro. —Escupe con sarcasmo. —Aunque debo admitir que eso sería cool. —¿Nos conocemos?—Pregunto sin poder evitarlo. —Osea ya se quien eres, ¿Pero desde cuándo somos amigos? —Oh —Él sonríe y luego contesta.— Realmente no somos amigos pero, claro que me gustaría. Hablamos en la fiesta anoche ¿No lo recuerdas? —Pregunta aún sin dejar de sonreír. —Lo siento... Estaba algo ebria y no recuerdo mucho de lo que sucedió anoche. —Respondo algo avergonzada. —Descuida no es nada, luego lo recordarás. ¿Te parece si vamos juntos a desayunar? —Pregunta tomándome por completa sorpresa, ¿Tan cercanos nos hicimos anoche? ¿A caso fue él quien me llevó a casa? No, no, es imposible, él ni siquiera sabe donde vivo. —¿Ya terminaron las clases? —Le pregunto ignorando todo lo demás. —Si, terminaron hace unos 10 minutos. —Dios... el tiempo si que pasó volando.— ¿Y, vamos? —Vuelve a preguntar. —Esta bien, vamos. —Respondo aceptando su propuesta, no le veo nada de malo, además no es como si fuera una cita y aún si lo fuera, no tendría problemas con ello. Después de todo soy una mujer libre y sin compromisos.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD